Poemas

10, la mujer perfecta

Hola, amigos y amigas del blog.

Hoy os traigo un poema muy curioso.

El poema se llama “Suspenso” y es una especie de confesión de un estudiante frustrado que no consigue sacar buenas notas ni ligar con las chicas. ¿Os suena?

¿Te ha pasado alguna vez que te enamoras de alguien que no te hace caso y te sientes como si estuvieras en un examen que no puedes aprobar? Pues eso es lo que le ocurre al protagonista de este poema, que se lamenta de su mala suerte en el amor con una ironía muy graciosa. El poeta se burla de las notas escolares y de las expectativas sociales, y nos muestra que el amor no se mide con números, sino con sentimientos.

A mí me recuerda a mis años de instituto, cuando me pasaba horas estudiando para los exámenes y luego me ponían un cuatro o un cinco. Y encima, la chica que me gustaba ni me miraba. ¡Qué tiempos aquellos!

El poema es una reflexión sobre el fracaso y la insatisfacción del poeta, que se siente incapaz de alcanzar el éxito en el amor y en la vida. 

SUSPENSO 
El diez ha de ser suspenso 
porque el uno no es aprobado 
y el once ya parece demasiado. 

Y tú, mujer aún sin nombre, 
a ti ya te han numerado 
Y a pesar de tantos poemas, 
de tantos sueños inventados, 
a pesar de todo lo que he hecho, 
todavía no me han aprobado.

Sigo vagando pobre por la vida 
buscando el sobresaliente final, 
pero hasta ti me he arrastrado 
y como cualquier mal aprobado 
tu díez no ha de ser tan mortal.

Manuel Pellicer Sotomayor, Poema de 1995

Análisis

He encontrado algunos datos interesantes que te pueden servir:

  • Se trata de poemas breve, de tono irónico y humorístico, que refleja las experiencias amorosas del autor en su juventud.
  • El poema está compuesto por tres estrofas de cuatro versos cada una, con rima consonante en los versos pares (ABAB) y asonante en los impares (CDCD). El ritmo es irregular, alternando versos de siete, ocho y nueve sílabas.
  • El lenguaje es sencillo y coloquial, con algunas figuras retóricas como la personificación (el diez ha de ser suspenso), la metáfora (vagando pobre por la vida) o la hipérbole (tantos poemas, tantos sueños). con algunas expresiones populares como “como cualquier mal aprobado”.
  • El tema del poema es el desamor, expresado mediante la metáfora del examen escolar. El hablante lírico se compara con un alumno que suspende constantemente y que no consigue el aprobado de la mujer amada, a la que llama “mujer aún sin nombre”.
  • El tono es de resignación y desencanto, pero también de cierta burla hacia sí mismo y hacia el sistema educativo.

El poeta utiliza el símbolo del diez como la nota máxima que desea obtener, pero que siempre se le escapa. El uno es el suspenso, el once es la exageración, y el diez es el equilibrio perfecto que nunca logra.

Comentario

El poema empieza con una frase muy graciosa: “El diez ha de ser suspenso”. ¿Qué quiere decir esto? Pues que el poeta está tan acostumbrado a suspender que ya no le importa el diez, que es la nota más alta. Él dice que el uno no es aprobado, porque es la nota más baja, y que el once ya parece demasiado, porque es una nota imposible. Así que se queda en el medio, sin pena ni gloria. ¿No os parece una forma muy original de expresar el desencanto y la resignación?

El poeta se dirige a una mujer sin nombre, que representa a todas las mujeres que ha amado o deseado, pero que nunca han correspondido a sus sentimientos. El poeta le dice que a ella ya la han numerado, es decir, que ya tiene una calificación asignada por la sociedad o por él mismo. Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos por conquistarla con sus poemas y sus sueños, él sigue siendo un mal aprobado, un mediocre que no consigue su atención ni su amor.

El poema termina con una frase muy ambigua: “tu díez no ha de ser tan mortal”.

¿Qué quiere decir esto? Pues depende de cómo lo interpretemos.

Por un lado, puede ser una forma de aceptar su destino y conformarse con lo que tiene. El poeta dice que el diez no es tan importante ni tan definitivo, que quizás pueda vivir sin él.

Por otro lado, puede ser una forma de rebelarse y cuestionar el sistema. El poeta dice que el diez no es tan bueno ni tan deseable, que quizás tenga sus defectos o sus inconvenientes.

No os parece muy triste y muy tierno a la vez?

¿Qué os parece a vosotros? ¿Qué opción os gusta más?

Conclusión

Bueno, espero que os haya gustado este poema y que os haya hecho reflexionar sobre el valor de las notas y del amor. Yo creo que lo importante no es sacar un diez, sino disfrutar del proceso y aprender de los errores. Y tampoco hay que obsesionarse con una persona, sino abrirse a otras posibilidades y ser uno mismo. ¿Qué opináis vosotros?

Así que ya sabes, si te sientes suspenso en el amor, no te desanimes, quizás algún día encuentres a tu sobresaliente final. O mejor aún, a tu matrícula de honor. 😉

Dejad vuestros comentarios y sugerencias, y hasta la próxima entrada del blog. ¡Un abrazo!

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