Introducción
El 4 de noviembre de 1982 yo estaba en Toledo.
Hay pocos de esos visitantes ilustres que ha recibido de la ciudad de los que he sido consciente y partícipe en el momento, ya fuera porque yo aún no había nacido o porque no se dieron las circunstancias para ello.
Sin embargo, ya fuera por la notoriedad de la visita o porque fuera inevitable no sentir la curiosidad, de esta visita sí fue partícipe, hasta donde se me permitió y mis padres se permitieron llevarme, que tampoco fue mucho. Le vi pasar montado en el papamóvil cuando se dirigía hacia la catedral.
De sus primeras palabras en España, de debido a la pronunciación, recuerdo que sus palabras sonaron como: «Amados ‘higos’ de España«.
Creo que fue en Valencia donde le regalaron una cesta de higos.
Los jóvenes de España en sus últimos años acostumbraban a gritarle «Ésta es la juventud del Papa». Sin embargo, yo en 1982 me conformaba con ser: «un ‘higo’ del Papa»
La visita
La visita del Papa a Toledo fue un acontecimiento histórico que tuvo lugar el 4 de noviembre de 1982. El Papa Juan Pablo II llegó en helicóptero al barrio de Santa María de Benquerencia, donde celebró una misa multitudinaria ante miles de personas. Después, se trasladó en el Papamóvil hasta el Seminario, donde fue recibido por autoridades y fieles. El Papa firmó el libro de firmas de la ciudad y recibió la llave de la ciudad de manos del alcalde Juan Ignacio de Mesa. La visita del Papa duró unas horas, pero dejó una huella imborrable en la memoria de los toledanos.
El video de la visita del Papa a Toledo
El papa Juan Pablo II, fallecido en 2005, visitó la ciudad de Toledo el 4 de noviembre de 1982. Miles de toledanos y católicos de toda España abarrotaron la explanada del barrio de Santa María de Benquerencia, popularmente conocido como el Polígono, en la que el pontífice ofició una multitudinaria misa que todavía es recordada en la capital de Castilla-La Mancha. Pero ha sido ahora, cuando se cumplen 40 años de aquella cita, cuando ha salido a la luz un vídeo inédito de la jornada.
Ha sido la Filmoteca Histórica Toledana, el canal de YouTube de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo (RABACHT), la encargada de publicar y difundir estas históricas imágenes grabadas por el académico Guillermo Santacruz Sánchez de Rojas, que fue arquitecto municipal de Toledo.
«Miles de personas se concentraron en la enorme explanada comprendida entre la actual Biblioteca y el colegio Gómez Manrique, espacio ocupado hoy por el Recinto Ferial, el centro de acogida de Cáritas y otras edificaciones que aún no existían en 1982″, ha recordado en una nota de prensa la Real Academia toledana sobre la visita de Karol Wojtyla a la ciudad.
Durante el vídeo, que dura algo más de tres minutos, aparecen cientos de toledanos entre los que es posible identificar a figuras como el político Enrique Prieto, el notario Manuel Nebot o el doctor Rafael Sancho de San Román, que fue director de la RABACHT.
En ella se recoge la llegada del pontífice en helicóptero, procedente de Guadalupe, y la ceremonia que ofició en el barrio de Santa María de Benquerencia. El vídeo, aunque breve, permite apreciar el dispositivo policial y centra la mirada en algunos de los asistentes, como el entonces alcalde de Toledo, Juan Ignacio de Mesa (quien entregó al papa las llaves de la ciudad), el presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Gonzalo Payo , y el cardenal Marcelo González.
El encuadre de la grabación permite apreciar que a finales de 1982 no había nada construido aún entre el Centro Cívico del barrio, en la calle Río Alberche, y el conjunto de bloques construidos en Río Valdemarías con esquina a Río Guadarrama.
Concluido mi inolvidable viaje apostólico a España, transmito expresiones de profunda gratitud a VD y a cuantos han colaborado con ejemplar entrega y empreño preparación y desarrollo visita esa diócesis. Al reiterar sentimientos sincera benevolencia otorgo una vez más cordialísima esa amada comunidad eclesial de Toledo
Oiannes Paulus PP II
Gracias Toledo porque has sacado a relucir tu religiosidad profunda.
Porque has sabido prepararte para esta jornada inolvidable, sin que la fatiga ni el sacrificio hayan mermado el entusiasmo cálido, filial y acogedor que el Papa merecía.
Gracias, pueblo toledano porque con tu colaboración generosa por nadie regateada, con el servicio de tantas personas sin protagonismos, con la disponibilidad de tus jóvenes, con los mil y un detalles de gentes anónimas, entre todos hemos ofrecido unos panes, con los cuales Dios ha multiplicado este milagro que siempre recordaremos.
También el Papa se ha llevado un grato recuerdo de nosotros; no le hemos decepcionado. Así lo ha expresado en una audiencia general haciendo un balance de su último viaje apostólico: «Agradezco al Señor por la riqueza de sanas energías y propósito generosos que he encontrado en España».
Al despedirse de nosotros, yo me he atrevía a decirle: «Santo Padre, ¿marcha contento de Toledo?» «Muy contento», me respondió. Y animado por el semblante de alegría que veía en su rostro, proseguí: «Entonces, Santo Padre, este viaje no puede ser el último; debe ser el primero; Toledo le espera». «Muy bien, gracias; lo tendré muy presente» fue su respuesta.
Todos hubiéramos querido retenerle más tiempo; cuando el helicóptero se elevaba sobre nosotros me vino a la memoria el instante de aquellos primeros cristianos mirando con nostalgia, fijamente, hacia lo alto, en el momento de la Ascensión. Y también recordé: «Éste que os ha llevado , volverá»
Como entonces, también ahora terminaba una etapa y se iniciaba otra: la nuestra, entre todos debemos hacer que fructifique este regalo inmenso que Dios nos ha dejado en Juan Pablo II, testigo de esperanza.
¡Bendito seas por siempre, Señor!!
Joannes Paulus PP II. Viaje apostólico a España 31 oct-9 nov 1982
Tras el último verso 
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