No hay miedo en tus ojos

Hola, amigos y amigas del blog.

Hoy os traigo un poema que me ha dejado sin palabras. Se trata de «No hay miedo en tus ojos» de Manuel Pellicer Sotomayor, un poeta que no conoce el significado de la palabra «no».

Y es que este hombre está dispuesto a darle todo lo que le pida su amada, sin importar lo que sea.

NO HAY MIEDO EN TUS OJOS
No hay guerra, frontera ni estandarte,
no hay nada que un día tú me pidas,
nada, que pudiendo, yo no quiera darte.
Pero pide, que no hay miedo en tus ojos.
Sueña así con cielos azules a tu antojo;
Desea caprichos que nunca hayas tenido;
Pídele al oído nidos de dulces palabras;
Acalla el silencio, si alguna vez te molesta
y grítale al ruido en tus días de fiesta.

Sé princesa en los castillos flotantes del aire,
habita en nubes de algodón que te protejan,
alcanza metas que se alejen de lo imposible.
O no pidas nada, si crees que lo tienes todo,
que hasta las flores se inclinan a tu paso,
asombradas por lo que siembran tus huellas,
por lo despacio que a veces sopla el viento,
por la suavidad del mar al llegar a la arena.

Lo que pidas, ya lo tienes, aún sin pedirlo,
que yo tan solo espero que el sol amanezca.
Y si hay lluvia que enturbia en algo mis ojos,
si encuentro tormentas que taponan mi puerta,
no hay guerra, frontera ni estandarte,
no hay nada que un día tú me pidas,
nada, que pudiendo, yo no quiera darte.

Manuel Pellicer Sotomayor Poema de 2018

¡Qué bonito poema! Me encanta cómo el autor expresa su amor incondicional y su generosidad hacia la persona amada. 🥰

Análisis y comentario

Pero, ¿qué tal si le damos un toque de humor a este análisis? 😂

Aquí tienes un posible blog divertido para comentar el poema:

  • No hay guerra, frontera ni estandarte: Esto significa que no hay ningún obstáculo que se interponga entre ellos. Ni siquiera una guerra mundial, una frontera cerrada o una bandera enemiga. El amor lo puede todo, amigos. O eso dice él, porque yo creo que si hay una guerra, lo primero que haría sería esconderse debajo de la cama. 😅
  • Sueña así con cielos azules a tu antojo: Aquí el poeta le dice a su amada que sueñe con lo que quiera, que él se lo hará realidad. ¿Que quiere un cielo azul? Pues nada, le pinta el techo de azul y listo. ¿Que quiere viajar por el mundo? Pues nada, le compra un globo terráqueo y le hace girar el dedo. ¿Que quiere ir al espacio? Pues nada, le regala un cohete de juguete y le pone una peluca de astronauta. Todo sea por complacerla. 😜
  • Desea caprichos que nunca hayas tenido: Aquí el poeta se viene arriba y le dice a su amada que le pida lo que quiera, por muy caro o raro que sea. ¿Que quiere un collar de diamantes? Pues nada, le roba uno a la reina. ¿Que quiere un unicornio? Pues nada, le pega un cuerno a un caballo. ¿Que quiere ser famosa? Pues nada, le crea una cuenta falsa en Instagram y le pone miles de seguidores. No hay límites para este hombre. 😎
  • Sé princesa en los castillos flotantes del aire: Aquí el poeta se pasa de romántico y le dice a su amada que sea una princesa en unos castillos imaginarios que flotan en el aire. ¿Qué clase de castillos son esos? ¿De qué están hechos? ¿De nubes? ¿De algodón de azúcar? ¿De humo? Y lo más importante: ¿Cómo se llega a ellos? ¿En avión? ¿En helicóptero? ¿En globo aerostático? Esto es muy confuso, amigos. 😕
  • Lo que pidas ya lo tienes, aún sin pedirlo: Aquí el poeta se supera a sí mismo y le dice a su amada que no hace falta que le pida nada, porque él ya se lo ha dado todo. ¿Todo? ¿En serio? ¿Le ha dado la felicidad? ¿La salud? ¿La paz mundial? ¿El sentido de la vida? Esto es demasiado, amigos. Este hombre es un mago, un genio, un santo. O un mentiroso, según se mire. 😏

Bueno, pues hasta aquí el análisis de este poema tan generoso y exagerado. Espero que os haya gustado y os haya sacado una sonrisa.

Y vosotros, ¿qué opináis de este poema? ¿Os gustaría tener un amor así de entregado y desinteresado? ¿O preferís algo más realista y equilibrado?

Dejadme vuestros comentarios y nos vemos en el próximo post. ¡Hasta pronto! 😘

Origen

  • Poema original de Manuel Pellicer Sotomayor
  • Conversación con Bing