Presentador: Ave, amigos de Imperium Romanum TV News.

Desde Imperium Romanum TV New os seguimos informando de los últimos acontecimientos acaecidos en el Imperio durante la presidencia del emperador Octavio Augusto César. En nuestra conexión anterior estuvimos en Toletum.

Hoy volvemos a contactar con nuestro enviado en tierras de Judea porque hemos conseguido una entrevista en exclusiva con Herodes I el Grande, el rey de los judíos, a quien hemos querido preguntarle por esta cuestión, dado que al parecer hay alguna controversia al respecto.

Antes de pasar a la conexión conviene que nuestros telespectadores sepan quién es Herodes el Grande

Herodes el Grande ha reinado sobre el pueblo judío durante prácticamente las cuatro últimas décadas. Destacando por:

• su eficaz gestión administrativa, por el lustre que la ha dado a Judea,
• las grandes obras como la reconstrucción del templo de Jerusalén,
• e incluso por gestos humanitarios como el reparto de grano, comprado de su propio peculio, en una terrible hambruna.

Pero Herodes no ha sabido, o no ha podido, conquistar el corazón de sus súbditos judíos: para ellos es siempre una piedra de escándalo y un motivo de rencor.

Ave, reportero, ¿Dónde te encuentras esta mañana?

Conexión

Reportero: Ave. Estoy aquí, en Jerusalén, en el palacio de Herodes el Grande, el rey de los judíos, para intentar aclarar la controversia suscitada en torno al censo por el emperador Octavio Augusto César y su aplicación en Judea.

Roma, hace 63 años, ha hecho de la antigua Judea un reino vasallo (que abarcaba Samaria, al norte, y Edom, al sur); adora a Herodes. Pocos monarcas se han mostrado tan complacientes con el naciente Imperio romano y tan solícitos en colaborar con él.

Esto se hizo patente cuando Octavio Augusto, tras vencer a Marco Antonio y Cleopatra en la batalla de Actium, llamó a su presencia a Herodes. Éste temió seriamente por su vida, pues hasta entonces había sido un activo partidario del enemigo mortal de Octavio, Marco Antonio.

Pero cuenta Josefo que el nuevo mandatario del Imperio ha sabido apreciar la fidelidad del rey de Judea a su enemigo como prueba de su lealtad sin fisuras a Roma. No sólo lo dejó con vida, sino que le declaró su profundo aprecio. Augusto mantiene excelentes relaciones con Herodes, pues éste se comporta como un subordinado ideal: sus informes periódicos son precisos y sabe que cualquier deseo que se exprese desde Roma era al punto ejecutado en su reino. 

Los aposentos para invitados de la corte real están siemprea a disposición de los nobles extranjeros –filósofos, historia­do­res, poetas y hombres de teatro – quienes desfilan in­cesantemente por la corte, y son invitados asiduamente a comer y a dormir a costa de las finanzas reales.

Reportero: Ave, majestad. Soy un reportero de Imperium Romanum TV News y me gustaría hacerle unas preguntas sobre el censo que ha ordenado el emperador Augusto en todo el Imperio. ¿Me concede unos minutos de su tiempo?

Herodes: Por supuesto, amigo. Estoy a disposición del emperador y de sus representantes. Pregunte lo que quiera.

Reportero: Gracias, majestad. Mi primera pregunta es: ¿Qué opina usted del censo de Augusto y su aplicación en Judea? ¿Qué beneficios o inconvenientes tiene para su reino?

Herodes: No tengo constancia de que en Israel se esté elaborando ningún censo por parte del Imperio Romano. Dependemos administrativamente del gobernador de Sirio y esté no nos ha dicho nada al respecto.

Reportero: Llevamos un tiempo informando a nuestros telespectadores de los movimientos migratorios de la gente, que regresa a sus poblaciones de origen con intención de participar en el censo.

Herodes: Lo lamento por esa gente, pero les han debido informar mal.

Reportero: Majestad, ¿sabe usted algo de José, un carpintero de Nazaret, y su esposa María, que suben desde Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, llamada Belén, para cumplir con el censo de Augusto, y que es muy posible que el nacimiento se produzca durante su estancia en Belén?

Herodes: ¿Qué importancia tienen un carpintero y una campesina que viajan a un pueblo insignificante? ¿Qué tienen de especial? ¿Acaso son de alguna familia importante o tienen alguna riqueza o poder?

Reportero: Son judíos, de la casa de David, que van a cumplir con el censo de Augusto. Tras nuestra entrevista de hace dos días se han ganado el aprecio de muchos de nuestros telespectadores.

Herodes: Pues, les agradezco que sean tan obedientes a las órdenes del emperador Octavio Augusto César, pero les recomiendo que retornen a lugar de procedencia porque durante mi reinado no se ha celebrado ningún censo.

Reportero: De todos modos, majestad. ¿Qué opinión le merece que el emperador Octavio Augusto César haya promovido la elaboración de ese censo dentro del Imperio?

Herodes: El censo de Augusto me parece una medida justa y necesaria para conocer el número y la situación de los habitantes del Imperio. Es una forma de garantizar la paz y la fidelidad hacia Roma, así como de recaudar los impuestos adecuados para el mantenimiento de las obras públicas y el ejército.

Para mi reino, el censo tendría beneficios evidentes, pues demostraría que somos una provincia próspera y leal, que colabora con el emperador y recibe su protección y su aprecio.

Reportero: ¿Y qué me dice de la reacción de algunos sectores de la población judía que se opone al Imperio y que una medida como el censo derivaría en disturbios y revueltas? ¿Cómo afrontaría usted esta situación?

Herodes: Lamentablemente, hay algunos judíos fanáticos y rebeldes que no aceptan la autoridad de Roma ni la mía. Son unos insensatos que quieren poner en peligro la estabilidad y la prosperidad de nuestro reino. Yo he actuado con firmeza y severidad contra ellos, pues no tolero que se altere el orden público ni que se desafíe al emperador. He mandado a sofocar las revueltas con la fuerza de las armas y he castigado a los cabecillas con la pena de muerte. No permitiré que nadie perturbe la paz que tanto me ha costado conseguir.

Reportero: ¿No cree usted que esa actitud puede generar más resentimiento y odio entre los judíos más piadosos y observantes de la ley de Moisés? ¿No teme que se produzcan más conflictos en el futuro?

Herodes: No, no lo creo. Los judíos más piadosos y observantes de la ley de Moisés deberían agradecerme que haya reconstruido y embellecido el templo de Jerusalén, que haya respetado sus costumbres y tradiciones, y que haya favorecido su desarrollo económico y cultural.

Yo soy un rey judío, aunque algunos lo pongan en duda por mi origen edomita. Yo no tengo nada contra la religión judía, siempre y cuando no se convierta en un pretexto para la sedición y la violencia.

Los que se oponen al censo son una minoría radical y extremista, que no representa al pueblo judío. Ellos son los que deben cambiar de actitud y aceptar la realidad de que vivimos bajo el dominio de Roma, que es el mejor destino posible para nosotros.

Reportero: Una última pregunta majestad. En caso de que le suceda su hijo Herodes Arquelao en el trono,. ¿Cabría la posibilidad de que se hiciera ese censo?

Herodes: Sí, mi hijo Herodes Arquelao está llamado a ser mi sucesor en el trono. A mí quizá no que queden muchos años de vida y habrá de ser él quien entre en negociaciones con el gobernador de Siria.

Reportero: Muchas gracias, majestad, por sus respuestas. Ha sido un placer conversar con usted.

Herodes: El placer ha sido mío, amigo. Espero que su programa de televisión refleje fielmente mis palabras y que contribuya a difundir la verdad sobre el censo de Augusto y su repercusión en Israel. Que el emperador le bendiga.

Reportero: Ya lo han escuchado, la elaboración del censo de Octavio Augusto Cesar no tiene aplicación en tierras de Judea. Antes de su aplicación requeriría una profunda pacificación del territorio. Devolvemos la conexión

Devolución de la conexión

Presentador: Ave, reportero. Buena entrevista

Ya lo han escuchado, si viven dentro del territorio de Judea durante el reinado de Herodes el Grande y van hacia sus poblaciones de origen para participar en el censo de nuestro emperador Octavio Augusto César, les rogamos que regresen a sus casas y tengan la prudencia de anotar debidamente las fechas en sus calendarios.

Nuestros reporteros seguirán investigando e intentaremos localizar a esa pareja procedente de Nazaret que va camino de Belén.

Aunque, por lo que nos informan, no son los únicos. Muchos se han solidarizado con esta pareja y también esperan ver a Jesús, al niño de esta pareja, que ya se ha ganado la simpatía de mucha gente.

Recuerden que el censo es una oportunidad para demostrar su lealtad al emperador y su gratitud por todo lo que ha hecho por nosotros. ¡Viva el emperador César Augusto! ¡Viva el Imperio romano!

Y a ustedes, queridos espectadores, les invitamos a seguir atentos a nuestra cobertura especial de este acontecimiento histórico.

Hasta una próxima conexión

Ave, amigos de Imperium Romanum TV News.

El censo

El censo de Quirino fue un censo de Judea realizado por Publio Sulpicio Quirino (51 a. C.-21 d. C.), gobernador romano de Siria, tras la imposición del dominio romano directo en el año 6 d. C.​

• El Evangelio de Lucas lo usa como medio narrativo para establecer el nacimiento de Jesús en Belén (Lucas 2:1-5),
• El Evangelio de Mateo ubica el nacimiento dentro del reinado de Herodes el Grande, quien murió 9 años antes (en el año 4 a. C.).

No parece posible una explicación satisfactoria de la contradicción.​ Raymond E. Brown opinaba que el autor de Lucas cometió un error.​

Fuentes

• Herodes el Grande, el rey que escandalizó a los judíos (nationalgeographic.com.es)
• Censo de Quirino – Wikipedia, la enciclopedia libre
• Fecha de nacimiento de Jesús – Wikipedia, la enciclopedia libre

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