¿Tú casa o la mía?: un poema sobre el amor y la geografía

Hola, amigo/ amiga del blog.

Hoy les traigo un poema que me ha llamado la atención por su originalidad y su humor. Se trata de “¿Tú casa o la mía?”, del poeta español Manuel Pellicer Sotomayor, que nos presenta un dilema amoroso entre dos personas que viven en lugares muy distintos.

Veamos qué nos dice el autor:

¿TU CASA O LA MÍA?
Tu casa es un hermoso palacio,
un jardín donde puedes pasear,
hay pájaros que le cantan al amor
y siempre está luciendo el sol
y cuando llega por fin la noche.
se cubre con un cielo de estrellas
con el olor de hermosas flores.


Mi casa es una cabaña en el mar,
unas casa en los límites de la playa,
para poder bañarnos con las olas,
para poder tumbarnos sobre la arena,
para poder tener la piel morena,
o admira la luna cada noche,
cuando ilumina con su luz el mar
y los peces llegan a la orilla
y puedes acercarte a pescar.


¿Tu casa o la mía? Ese es el problema
O tú te alejas de tanta tierra,
o yo me voy despidiendo del mar.
Una noche bajo las estrellas,
o el reflejo de la luna llena,
poder salir los dos a pasear,
o poder oler siempre aquellas flores.
¿Tu casa o la mía? Es el problema.

Manuel Pellicer Sotomayor. Poema de 1992

Análisis.

Como pueden ver, el poema nos muestra dos escenarios muy diferentes, pero igualmente bellos y románticos.

• Por un lado, tenemos la casa del palacio, que parece sacada de un cuento de hadas, con su jardín, sus pájaros, su sol y sus estrellas.
• Por otro lado, tenemos la casa de la playa, que nos invita a disfrutar de la naturaleza, el mar, la arena, la luna y los peces.

Ambas casas son el sueño de cualquier persona, pero también son el motivo de conflicto entre los enamorados. ¿Cómo elegir entre dos paraísos? ¿Cómo renunciar a uno de ellos por el otro? ¿Cómo conciliar el amor y la geografía?

El poeta no nos da una respuesta fácil, sino que nos deja con la pregunta: “¿Tu casa o la mía? Ese es el problema”. Y es que, a veces, el amor no es suficiente para resolver las diferencias que existen entre las personas. A veces, el amor implica sacrificios, renuncias, cambios. A veces, el amor nos pone a prueba y nos hace elegir entre lo que queremos y lo que tenemos. A veces, el amor es un problema.

Pero no todo es drama en este poema. También hay humor, ironía, juego.

El autor utiliza un lenguaje sencillo, coloquial, casi infantil, para contrastar con la gravedad del tema. También usa la repetición, la enumeración, la anáfora, para crear un ritmo musical y divertido.

Además, juega con las imágenes, las metáforas, las comparaciones, para crear un efecto de sorpresa y de contraste.

Por ejemplo:

cuando dice “para poder tener la piel morena”, nos hace pensar en el bronceado, pero también en la diferencia racial que puede haber entre los amantes.

O cuando dice “y los peces llegan a la orilla / y puedes acercarte a pescarles”, nos hace pensar en la pesca, pero también en la captura, en el dominio, en el poder.

En definitiva, este poema es una muestra de la creatividad y el ingenio de Manuel Pellicer Sotomayor, que nos hace reflexionar sobre el amor, la geografía, la identidad y la elección.

Un poema que nos hace reír, pero también nos hace pensar.

Un poema que nos hace preguntarnos: ¿tú casa o la mía?

¿Qué te ha parecido el poema? ¿Te ha gustado? ¿Te ha emocionado? ¿Te ha hecho pensar? ¿Te ha inspirado?

Espero tus comentarios y opiniones.

Hasta la próxima, amigo / amiga del blog.

¡Un abrazo!

Origen

• Poema original de Manuel Pellicer Sotomayor
• Conversación con Bing Chat (con modificaciones)