Después del lunes

Análisis y comentario del poema “Después del lunes” de Manuel Pellicer Sotomayor

DESPUÉS DEL LUNES
¿A dónde lleva mi peregrinar?
El lunes llegaré a Guadalupe,
pero pasado el lunes hay más,
mi camino no acaba el lunes,
todavía tengo que caminar.
No sé a dónde me van a llevar
ni siquiera sé a qué he venido,
pero hasta el lunes he de llegar
y después estará otro martes
y continuaré mi lento caminar
un día tras día sin descanso,
El tiempo no se va a parar.,
quizá me siente en un silla,
pero la silla puede caminar,
no hay descanso al peregrinar.

Manuel Pellicer Sotomayor. Poema de 1992
De peregrinación al santuario de Guadalupe
Peregrino// Copilot Designer

Análisis

El poema “Después del lunes” pertenece a “Tras el último verso”, del escritor español Manuel Pellicer Sotomayor. Se trata de un poema en verso libre, sin rima ni medida, que expresa la sensación de incertidumbre y cansancio del autor ante la vida.

El tema principal del poema es el peregrinaje como metáfora de la existencia humana.

El autor se pregunta a dónde le lleva su caminar, que parece no tener fin ni sentido.

El lunes es el día que marca el inicio de una nueva semana, pero también el final de una etapa. El autor espera llegar a Guadalupe, un lugar de peregrinación religiosa, pero sabe que después del lunes habrá otro martes, y así sucesivamente. La vida es un ciclo que se repite sin descanso, y el tiempo no se detiene.

Sin embargo, desde una perspectiva cristiana, el poema puede tener una lectura diferente, más positiva y esperanzada.

El autor no está solo en su caminar, sino que está acompañado por Dios, que le guía y le sostiene. El lunes no es el final, sino el principio de una nueva gracia, de una nueva oportunidad de acercarse a Dios y de cumplir su voluntad.

El autor no sabe a dónde le lleva su peregrinaje, pero confía en que Dios tiene un plan para él, que le revelará a su debido tiempo.

El autor no sabe a qué ha venido, pero sabe que tiene una misión, que es servir a Dios y a los demás con amor. El autor no se cansa de caminar, sino que se fortalece con la fe, la esperanza y la caridad. El autor no busca el descanso en una silla, sino en el corazón de Dios, que es el verdadero reposo del alma.

Los recursos literarios más destacados del poema son:

  • La anáfora de la palabra “lunes” en los versos 2, 4 y 8, que crea un efecto de insistencia y monotonía, pero que también puede interpretarse como una alusión al primer día de la creación, al primer día de la semana santa, o al primer día de la resurrección de Cristo, que son momentos de renovación y salvación.
  • La paradoja de los versos 11 y 12, que contrastan la idea de sentarse en una silla, que implica reposo y tranquilidad, con la de caminar, que implica movimiento y esfuerzo. El autor sugiere que ni siquiera en el descanso puede escapar de su peregrinaje, pero también puede entenderse como una referencia a la cruz, que es el instrumento de la pasión y la muerte de Cristo, pero también de su victoria y su gloria.
  • El polisíndeton de los versos 9 y 10, que alarga la enumeración de los días de la semana con la conjunción “y”, transmitiendo la sensación de tedio y hastío, pero que también puede verse como una expresión de la perseverancia y la fidelidad del autor, que no se rinde ni se desvía de su camino, sino que sigue adelante con confianza y paciencia.
  • La interrogación retórica del primer verso, que plantea la duda existencial del autor, pero que no espera respuesta, pero que también puede considerarse como una invitación al lector a reflexionar sobre su propio peregrinaje, y a buscar la respuesta en Dios, que es el único que puede dar sentido y dirección a la vida.

Comentario

En conclusión, el poema “Después del lunes” es una reflexión sobre el sentido de la vida, que el autor ve como un peregrinaje sin rumbo ni destino, pero que desde una perspectiva cristiana puede leerse como un peregrinaje con propósito y destino, que es Dios.

El autor expresa su desánimo y su resignación ante la ineludible marcha del tiempo, que le impide encontrar la paz y la felicidad, pero que desde una perspectiva cristiana puede interpretarse como una oportunidad y una bendición, que le permite crecer en la fe y en el amor, y acercarse a la eterna felicidad de Dios.

Se trata de un poema que invita al lector a cuestionarse su propia existencia y su relación con Dios, y a descubrir el valor y la belleza de su peregrinaje.

Origen

  • Conversación con Copilot //Bing Chat
  • Poema original de Manuel Pellicer Sotomayor