El cambista del templo

La higuera seca

Introducción

Hoy vamos a viajar al siglo I, a la ciudad de Jerusalén, donde se produjo otro de los episodios más sorprendentes de la vida de Jesús de Nazaret: la maldición de la higuera. ¿Qué motivó a Jesús a realizar este acto? ¿Cómo reaccionó el dueño de la higuera? ¿Qué significado tiene este milagro para los cristianos?

Para responder a estas preguntas, hemos entrevistado al dueño de la higuera que se secó por la palabra de Jesús. Les invitamos a escuchar su testimonio, que les conmoverá y les hará reflexionar.

Y dejándolos, salió fuera de la ciudad, a Betania, donde pasó la noche.

Al amanecer, cuando volvía a la ciudad, sintió hambre; y viendo una higuera junto al camino, se acercó a ella, pero no encontró en ella más que hojas. Entonces le dice: «¡Que nunca jamás brote fruto de ti!» Y al momento se secó la higuera.

Al verlo los discípulos se maravillaron y decían: «¿Cómo al momento quedó seca la higuera?»

Jesús les respondió: «Yo os aseguro: si tenéis fe y no vaciláis, no sólo haréis lo de la higuera, sino que si aun decís a este monte: «Quítate y arrójate al mar», así se hará.

Mateo 21, 18-21
una higuera seca al borde del camino // Copilot Designer

Al día siguiente, saliendo ellos de Betania, sintió hambre.

Y viendo de lejos una higuera con hojas, fue a ver si encontraba algo en ella; acercándose a ella, no encontró más que hojas; es que no era tiempo de higos.

Entonces le dijo: «¡Que nunca jamás coma nadie fruto de ti!» Y sus discípulos oían esto.

Mc 11,11-14

Al pasar muy de mañana, vieron la higuera, que estaba seca hasta la raíz..

Pedro, recordándolo, le dice: «¡Rabbí, mira!, la higuera que maldijiste está seca.

Jesús les respondió: «Tened fe en Dios. Yo os aseguro que quien diga a este monte: «Quítate y arrójate al mar» y no vacile en su corazón sino que crea que va a suceder lo que dice, lo obtendrá.»

Mc 11,20-23

Entrevista

Reportero: Buenas tardes, señor. ¿Podría decirnos su nombre y cómo se enteró de lo que le pasó a su higuera?

Elias: Me llamo Elías y soy un campesino que vive cerca de Jerusalén. Ayer por la mañana, cuando iba a regar mis higueras, me encontré con una escena horrible. Una de ellas estaba completamente seca, desde las raíces hasta las hojas. No entendía qué había pasado, hasta que unos vecinos me contaron que habían visto a Jesús maldecirla el día anterior.

Reportero: ¿Y por qué hizo eso Jesús?

Elías: Según me dijeron, Jesús venía de Betania y tenía hambre. Al ver mi higuera junto al camino, se acercó a ella, esperando encontrar algún higo. Pero como aún no era la temporada de los higos, solo había hojas. Entonces Jesús se enojó y le dijo a la higuera: «¡Que nunca jamás brote fruto de ti!» Y al momento se secó.

Reportero: ¿Qué sintió usted al ver su higuera destruida?

Elías: Tristeza, impotencia, injusticia. ¿Qué culpa tenía mi higuera de que Jesús tuviera hambre? ¿Qué derecho tenía él de arruinar mi cosecha, que era mi sustento y el de mi familia? ¿Qué autoridad tenía para hablar en nombre de Dios y castigar a una criatura inocente? Era un abuso, una crueldad, una falta de respeto.

Reportero: ¿Y qué piensa usted de Jesús ahora?

Elías: Pienso que es un falso mesías, un enemigo del pueblo, un peligro para la ley. Espero que las autoridades lo detengan pronto y lo castiguen como se merece. No podemos permitir que siga haciendo milagros falsos y engañando a la gente con sus palabras. Es un impostor, un seductor, un anticristo.

Reportero: Gracias por su testimonio, señor. Que tenga un buen día.

Elías: Igualmente, adiós.

Reportero: Gracias por compartir su experiencia con nosotros. Les Mantendremos a informados sobre cualquier desarrollo futuro en esta historia. Devolvemos la conexión

Devuelve la conexión

presentador del programa

Presentador: La maldición de la higuera es un signo de la autoridad y el poder de Jesús, que puede hacer milagros tanto para dar vida como para quitarla. También es una enseñanza sobre la fe y la oración, que pueden mover montañas si se cree de todo corazón.

Además, es una advertencia para los que aparentan ser religiosos, pero no dan fruto de amor y justicia.

La higuera representa a Israel, que había fallado en cumplir su misión de ser luz de las naciones y había caído en la hipocresía y la corrupción.

Jesús anuncia el juicio de Dios sobre el templo y la nación, que serán destruidos por los romanos en el año 70 d.C. Pero también anticipa su propia muerte y resurrección, que serán el nuevo templo y el nuevo Israel, donde Dios habita por medio de su Espíritu.

Origen

Maldición de la higuera – Wikipedia, la enciclopedia libre