Carta pública del druida

🎙️ Noticiario imperial: año 747 ab urbe condita (7 a.C.).

serie: Toletum

📜 ACTA DIURNA IMPERIALIS (durante la Era del Divino Augusto)

Transmisión desde el estudio central de Roma, en el año DCCXLVII ab Urbe condita (7 a.C.)

Lucius Valerius: Ciudadanos de Roma, ciudadanos del mundo. Desde la antigua urbe de Toletum, enclavada en el corazón celtíbero de la provincia Tarraconense, nos llega hoy una crónica que no nace en el estruendo de las legiones ni en los edictos del senado, sino en el crujir de los hogares, en la quietud de los atrios y en el murmullo constante del río Tagus.

Lucius Valerius, Presentador del programa

🎙️ «Del hogar al foro: la romanización entra por la puerta y cambia la mesa».

Nos informan nuestros colegas —entre ellos, el infatigable Gaius Valerius— que la romanización ya no es solo cuestión de calzadas, templos y gobernadores. Ahora se infiltra en el modo en que se come, se conversa y se sueña.

🏛️ División entre generaciones:

Los padres carpetanos, formados en la frugalidad del hogar tribal, en las mesas austeras y los cultos antiguos al fuego del lar, comienzan a sentir que sus hijos se deslizan suavemente hacia una vida más licenciosa, o al menos, más itálica. Comer tumbado, brindar con vino mezclado con especias, cantar versos en latín en lugar de viejas estrofas de guerra… Todo ello provoca discusiones en los patios al atardecer.

Uno de ellos, Nertobrico, viejo curtidor de pieles, lo expresó así en una carta enviada al acta diurna:

“Yo forjé mi casa sobre piedra y silencio. Mi hijo quiere llenar la suya de estatuas y música. No sé si ha aprendido a vivir mejor, pero sí que se ha vuelto más hablador”.

👩‍🦱 Cambio del papel de la mujer:

Las matronas carpetanas —en otro tiempo guardianas de la tradición oral y de la casa sobria— se están convirtiendo, según los informes, en arquitectas del gusto romano. Ellas decoran con columnas falsas, disponen cojines en forma de medialuna y enseñan a sus hijas a celebrar la Floralia y a saludar al amanecer con himnos latinos en vez de los ancestrales cánticos a Lugh.

Esto ha provocado un resurgimiento de tensiones no declaradas en algunos hogares, donde el matrimonio se convierte en un pequeño senado privado con votaciones emocionales diarias.

🕊️ Religión y ritos:

Las nuevas generaciones, al entrar en contacto con mercaderes judíos, filósofos griegos itinerantes y legionarios nacidos en las riberas del Nilo, empiezan a cuestionar los ritos tribales de los antepasados. Algunos incluso celebran las Saturnales con máscaras de teatro, y otros visitan sin temor las sinagogas para escuchar proverbios enigmáticos y sabiduría ancestral.

No es aún una crisis, pero sí un choque silencioso entre la fe de los mayores y la curiosidad de los jóvenes.

📣 Conclusión de Lucius Valerius:

Toletum no arde en guerras, ni se levanta en rebelión. Pero algo más profundo hierve en sus entrañas:

la eterna batalla entre la tradición y el deseo de eternidad.

Y si es cierto lo que dijo aquel viejo sabio:

Una ciudad no se conquista por fuera hasta que se abre por dentro”.
Entonces debemos seguir atentos.

Aquí Lucius Valerius, desde Roma, pero con el oído en Toletum, donde las casas hablan, los cojines susurran y el alma del pueblo se redecora sin perder su piedra fundacional.

📜 CARTA PÚBLICA DEL DRUIDA NANTIGENO

Emitida desde las colinas sagradas junto al río Tagus, en respuesta a los recientes informes sobre la creciente romanización de los hogares toletanos.

🪶 A los hombres que se tumban para comer sin haber trabajado la tierra,
a las mujeres que visten sus hogares con cojines ajenos,
y a los jóvenes que cambian el nombre de los dioses por modas de mármol,

Habla Nantigeno, último de los druidas consagrados a los dioses del bosque y la piedra.
hijo de la niebla, nieto del trueno, nacido cuando los robles aún tenían palabra y no sombra.

¿Qué es esto que hacéis?

¿Acaso se os ha olvidado que Toletum no fue fundada por senadores ni levantada con columnas de mármol, sino con barro, sudor y canciones alrededor del fuego? Antes de que llegaran las legiones, nosotros ya caminábamos las veredas del Tagus. Nuestros padres ofrecían pan al sol y sangre al río.

¡Y ahora, ahora, cambiáis el canto del tambor por la flauta dulce del extranjero!

🏺 ¡Coméis tumbados!

¿Dónde ha quedado la mesa donde el padre hablaba y el hijo escuchaba erguido? ¿Dónde la cuchara de madera que pasaba de mano en mano con respeto? Comer reclinados como los romanos no es signo de nobleza, sino de olvido. ¿Cómo vais a defender vuestra tierra si no sabéis estar en pie ni a la hora de la comida?

🕯️ ¡Llenáis las casas de perfumes, pero vaciáis los espíritus!

Las mujeres, que eran columna del hogar, ahora buscan inspiración en Roma, cuando ya tenían en sus abuelas a las verdaderas matronas del honor. ¿Qué hay en esos cojines importados que valga más que el tejido que nuestras manos tejieron al ritmo de los rezos a la Madre Tierra?

🔥 ¡Estáis apagando el fuego del alma de Toletum!

Una ciudad no se pierde por conquista, sino por vergüenza de sí misma. Cuando llamáis «progreso» a sustituir el altar del hogar por una escultura romana del dios Mercurio, estáis declarando vuestra rendición sin que el enemigo haya empuñado la espada.

🌿 Por eso os hablo hoy, con ira justa y palabra antigua.

Toletum puede vestirse con túnicas, pero su espíritu es de cuero curtido.
Puede pavimentar calles, pero sus raíces están en el barro sagrado.
Puede recibir caminos, pero no debe perder su norte.

Recordad: una ciudad sin memoria es un eco vacío.
Y yo, Nantigeno, no me sentaré a comer tumbado mientras se duerme la verdad de los nuestros.

Firmado:
🪵 Nantigeno,
Druida de las Colinas del Tagus,
Custodio de la Piedra Roja,
Testigo de los árboles que aún saben.

Despedida

¡Eso es todo por hoy, ciudadanos! Que los dioses os sean propicios. Volveremos mañana con más noticias que forjan el destino de nuestro glorioso Imperio.

Valete… y que vuestros pensamientos viajen más rápido que las legiones.

Sigan atentos, ciudadanos.

📡 Esto ha sido ACTA DIURNA.

Valete, amigos de Imperium Romanum TV News.

“Vox Romana: “Audimus, Videmus, Narramus!”

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