Francisco de Quevedo (1580-1645)
CERRAR PODRÁ MIS OJOS LA POSTRERA
Cerrar podrá mis ojos la postrera
sombra, que me llevare el blanco día;
y podrá desatar esta alma mía
hora, a su afán ansioso lisonjera:
mas no de es otra parte en la rivera
dejará la memoria, en donde ardía;
nadar sabe mi llama la agua fría,
y perder el respeto a ley severa.
Alma, a quien todo un dios prisión ha sido,
venas, que humor a tanto fuego han dado,
medulas, que han gloriosamente ardido;
su cuerpo dejarán, no su cuidado;
serán ceniza, mas tendrá sentido;
polvo serán, mas polvo enamorado.
Manuel Pellicer (Presente)
SERÁN CENIZAS Serán ceniza, mas tendrá sentido; polvo será, mas polvo enamorado, lágrimas serán, mas suelo mojado, barro será, mas barro empapado. Manos serán, mas manos de alfarero. noria será, mas vueltas de mareo, botijo será, mas de agua está lleno, la sed será, pues estoy sediento. El agua será lo que apague el fuego, agua será lo que asiente el polvo, lágrimas serán las que busquen consuelo. Serán ceniza, mas tendrá sentido; de la pasión que ardió en el pasado, de un amor que ya se ha consumido
(26/02/2012)