Poemas

No podré vivir mi muerte

Análisis y comentarios sobre el poema

El poema que has elegido es «No iré a mi entierro», de Manuel Pellicer, un escritor y poeta toledano que publica sus obras y sus reflexiones en su web .

No iré a mi entierro

Siento que no podré vivir mi muerte,
acercarme a ti para darte el pésame.
Mis dedos ya no secarán tus lágrimas,
mis oídos podrán ya así oír tus llantos,
no recibiré el perfume de tantas flores.

Me gustaría poder asistir a mi entierro,
pero estoy seguro que me será imposible,
porque mi alma estará lejos del cuerpo,
y en la tierra sólo se enterrará el hielo.

Y mi alma viva, mi espíritu libre, volará,
no querrá saber que me habré muerto,
ni cómo he de lamentar tus sentimientos,
que tan pronto se haya acabado mi vida.
Pero siento que no asistiré a mi entierro,
no tendré tiempo, porque estaré ocupado. 

Manuel Pellicer Sotomayor. 1993

Análisis

Se trata de un poema que expresa la angustia y la contradicción del hablante ante la idea de su propia muerte. El hablante siente que no podrá vivir su muerte, es decir, que no podrá ser consciente de lo que sucede después de su fallecimiento. No podrá consolar a su amada, que llorará por él, ni podrá disfrutar de las flores que le regalarán. Le gustaría poder asistir a su entierro, para ver cómo le despiden y cómo le recuerdan, pero sabe que eso será imposible, porque su mente se separará de su cuerpo y se liberará de las ataduras terrenales. Su mente viva y su espíritu libre volarán lejos de la muerte y del dolor, y no querrán saber nada de lo que ha dejado atrás. Pero al mismo tiempo, siente que no asistirá a su entierro porque estará ocupado, lo que sugiere que tendrá otras cosas que hacer o que ver en el más allá.

El poema tiene una estructura simétrica, formada por tres estrofas de cuatro versos cada una. La primera y la última estrofa comienzan con el mismo verso: «Siento que no podré vivir mi muerte», lo que crea un efecto de repetición y de cierre circular. La segunda estrofa comienza con el verso: «Me gustaría poder asistir a mi entierro», lo que crea un contraste con el verso anterior y con el siguiente. El poema tiene una rima consonante en los versos pares (pésame-lágrimas / llantos-sentimientos / hielo-ocupado) y una rima asonante en los versos impares (muerte-imposible / entierro-muerto / vida-entierro), lo que crea un ritmo armónico y melancólico.

El poema utiliza varios recursos literarios para expresar los sentimientos del hablante. Por ejemplo, utiliza la personificación para atribuir acciones humanas a la mente y al espíritu del hablante, como volar o estar ocupado. También utiliza la antítesis para contraponer conceptos opuestos, como vida y muerte, mente y cuerpo, hielo y fuego. Además, utiliza la hipérbole para exagerar la idea de que el hablante no podrá vivir su muerte ni asistir a su entierro.

En conclusión, el poema «No iré a mi entierro» es un poema que refleja la angustia existencial del hablante ante la muerte y el deseo de seguir viviendo después de ella. Es un poema que combina la forma y el fondo con armonía y elegancia, y que invita al lector a reflexionar sobre el sentido de la vida y el destino del alma.

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