Introducción
Ya te comenté hace tres meses que los toledanos íbamos a estar algún tiempo sin poder irnos de puente, que se nos iba a hacer un poco más larga la vuelta al Valle porque las obras nos cerrarían el paso sobre el río
Según parece, aunque hay obras que no terminan nunca, ésta ha llegado a su final y el lunes 29 de abril, a las seis de la tarde, el puente se volverá a abrir al tráfico y a los peatones, porque la intención de esta reforma es la de hacer un puente más seguro y accesible para todos.
Los toledanos podremos estrenar el puente el 1 de mayo, para subir a la ermita de la Virgen del Valle a tocar la campana
Un proyecto financiado con Fondos Europeos FEDER en el marco de la estrategia EDUSI que ha contado con un presupuesto total de 554.291 euros y que ha sido «un empeño del equipo de Gobierno para sacarlo adelante», ha informado el Consistorio en nota de prensa.
Y es que, como ha recordado el alcalde, estas obras deberían haber empezado en octubre del año 2022 y contaban con una bandera roja por parte del comité antifraude por posibles problemas de estabilidad en el futuro.
Tras revisar y justificar los informes técnicos y jurídicos, «el equipo de Gobierno consiguió salvar este proyecto tras aprobar con carácter de urgencia en una Junta de Gobierno Local del mes de septiembre la adjudicación del contrato de las obras de recalce de la cimentación del puente nuevo de Alcántara a la empresa Estructuras Técnicas y Servicios de Rehabilitación SL ETYSER por un importe de 89.715,35 euros», defienden desde el Consistorio.
Una obra necesaria para construir la pasarela peatonal que permitirá completar la ronda del Valle y mejorar el acceso de los peatones a través de este puente que se construyó en 1933.
Un proyecto que «permitirá recuperar la tradicional vuelta al Valle para los toledanos y visitantes, garantizando la seguridad a su paso por el puente«, ha indicado el regidor durante su visita, junto al concejal de Planeamiento Urbanístico, Florentino Pérez; la concejal de Obras y Servicios, Loreto Molina; miembros de la empresa adjudicataria; y técnicos municipales.
Incorpora una acera de 1,8 metros de ancho por sentido para el tránsito peatonal y mejorará la integración del puente con el entorno patrimonial y medioambiental gracias al uso de materiales como el granito rubio o el acero corten, además de una carta cromática en tonos ocre y tierra para minimizar el impacto visual de esta construcción que se remonta a principios del siglo XX,
Tras el último verso 
Debe estar conectado para enviar un comentario.