Introducción
Lo que evidencia la versión de Ana sobre este primer despertar, como escritor me salió de una manera bastante divertida, como evidencia del buen ambiente que se supone que ha de haber, donde se mezcla un poco de todo, el remordimiento por no dormir lo suficiente, la falta de más cuartos de baño y la inquietud por reencontrarse con los chicos.

Despertar
Ana es quien se atribuye la responsabilidad de despertar a las demás y de sus palabras de deduce que comparte la queja de todo el grupo por la hora, tanto a la que se acostaron como a a que suena su despertador; que, de haber sido factible, se hubieran dejado vencer por el sueño y la pereza un poco más.
Que el despertador suene a las 08:00 am, después de haberse acostado tarde por haber estado compartiendo confidencias, no resulta demasiado motivador para ninguna y de algún modo Ana se siente culpable de no haber sido un poco más diligente en ese sentido. Ella es la responsable, pero se dejó llevar por el entusiasmo de las demás y ahora no puede evitar tomarse el despertar un poco más en serio.

Son once chicas bajo un mismo techo y no hay cuartos de baño suficientes, por lo que se encuentran en la tesitura de compartirlo y que esto se convierta en una carrera contrarreloj, dado que no se pueden entretener toda la mañana en asearse, porque, además, se supone que los chicos no serán más madrugadores que ellas y la hora marcada para el rezo de laudes será la misma para todos.
- ¿Serán once chicas capaces de espabilar más que siete chicos?
- ¿Acaso no deberían ellas haberse despertado antes por el hecho de ser un grupo más numeroso y ser chicas?
Por lo que Ana da a entender, se trata de una carrera tácita, una cuestión de orgullo personal ser más rápidas que los chicos, que, dado que se supone que han de pasar por delante de la casa de éstos para llegar a la iglesia, incluso se plantean presentarse allí antes de que empiecen a salir.
La cuestión es dar a entender que ya hay mentalidad de estar viviendo la Pascua y se considera esta separación entre los alojamiento como un detalle menor que tampoco debería afectarles. La Pascua es la misma para todos y ellas no parecen muy dispuestas a que les reprochen su falta de implicación.
Los privilegios de Ana
Ella es la primera en reaccionar, porque es la encargada de despertar al resto, pero también comenta que como encargada de las llaves, de cerrar, se queda como la última en asearse, con lo que consigue estar un poco más relajada al principio, porque dispone de más tiempo para prepararse, para asumir el control de la situación sin que nadie requiera de ayuda, porque todas se apañan solas.
De estas primeras divagaciones matinales, sin que haya una alusión ni mención directa de éste, se puede deducir que, en su caso, ese interés por reencontrarse con los chicos, por saber cómo han pasado esa primera noche, tiene un nombre propio. Sin embargo, Ana se lo toma con tranquilidad. Prefiere ser comedida con su curiosidad e impulsos. Mejor que Manuel no se lo crea demasiado ni demasiado pronto.

Incluso se podría pensar que después de la actitud mantenida por éste al final del día anterior, ella podría sentirse un poco más desencantada, que Manuel ha perdido el interés por ella o lo reprime por ese empeño en vivir la Pascua en serio, como no queriendo caer en la cuenta de que, en el fondo, si le han convencido para que acuda a esa convivencia, a ese pueblo, tiene una doble intención.
Es más, el hecho de que chicos y chicas se vayan a reencontrar para el rezo de laudes, no es motivo para que Ana mencione la posibilidad de reencontrarse con Manuel, lo que da a entender que se muestra reservada y prudente con esos primeros impulsos y planteamientos.
Ella también ha acudido con intención de vivir la Pascua y lo de su historia de amor no es tan relevante, se dará por añadidura, en caso de que llegue a formalizarse de algún modo, en algún momento. Hasta el domingo por la tarde aun hay tiempo para pensárselo.
Podemos suponer que Ana anda medio dormida por la falta de sueño, que, si ha salido del saco ha sido por seguir la inercia de las demás, porque ya está mentalizada del horario, el cronograma de la convivencia y se mueve de manera un tanto automática. Que, aunque lo piense, no está lo bastante centrada.
Jueves Santo, 17 de abril 2003
08:00 Despertar
09:00 Rezo de laudes en la iglesia
09:30 Preparación del desayuno (Grupo 1)
09:45 Desayuno en el comedor
10:30 Primera meditación en la iglesia
12:00 Confesiones y tiempo de oración individual
13:30 Preparación del comedor (Grupo 2)
14:00 Comida
15:00 Siesta
16:00 Reunión por grupos, preparación de los Oficios
18:00 Oficios de Jueves Santo
19:30 Oración ante el Monumento
20:30 Preparación de la cena (Grupo 3)
21:00 Cena
22:00 Tiempo de aseo
22:30 Hora Santa
23:30 ¿?
00:30 Turnos de vela y oración y/o descanso

Debe estar conectado para enviar un comentario.