Introducción
Monday, June 20, 1994 (09:00 pm)
Soy la mayor ignorante por convicción sobre todo lo referente a España, su cultura y su idioma. En el fondo me temo que Ana sospecha que me engaño a mí misma y cualquier día me demostrará que sé más de lo que quisiera, aunque mucho menos de lo que se me exigiría a mi edad y con la educación recibida.
Si tenemos algo claro de Jessica, es que es de las de «I don’t speak Spanish«, dicho en un perfecto inglés americano del área de Boston, por una adolescente un tanto testaruda, para resaltar eso de que se niega a hablar en español, aun a pesar de las consecuencias que de esta ignorancia o férrea resistencia se pudieran derivar.
Sin embargo, por lo que Ana consigue comprobar, y se demuestra cada vez que le pide ese pequeño esfuerzo, esta jovencita lo que tiene es mucho cuento, «cuentitis fritis«. porque es capaz de escribir un texto en español y traducir textos sin demasiadas dificultades, aunque se evidencie esa falta de soltura. Es más, incluso su pronunciación en la lectura tampoco es tan desastrosa.

Cabe pensar que ese aprobado por la mínima en la asignatura de Spanish tampoco es un mero buenismo por parte del profesor para cubrir el expediente y que no parezca tan grave que Jessica se ausente de esa clase con pleno conocimiento y convicción. Ana la obliga a estudiar cuando está en el St. Clare’s, aunque el libro de la asignatura esté de adorno y sea materia que ocupa un lugar prescindible en la vida y rutina de Jessica.
Hemos de tener claro que aquí no se regala nada y que en el presupuesto no hay dinero para caprichos tontos. Que, si la exigencia académica mínima es un conocimiento básico de cada una de las asignaturas, no se hacen excepciones con nadie. El St. Clare’s, como institución, requiere de un cierto prestigio, dar una imagen de seriedad, donde se cría y educa a niñas procedentes de familias desestructuradas o que han sido abandonadas.
¿Se autoengaña?
No dice mucho en favor del St. Clare’s el hecho de que haya una de sus niñas que, por sus santas narices, se tome la libertad de considerarse exenta de una de las asignaturas impartidas en el colegio, que mientras sus compañeros de clase acuden al aula de la asignatura de Spanish, ella dirige sus pasos hacia la biblioteca, donde no se cruce con el profesor ni llegue a sus oídos nada de lo que allí se diga.

Sin embargo, como queda demostrado en la privacidad de su dormitorio, ese pretendido «privilegio«, esa supuesta coherencia de vida y firmeza en sus convicciones, se queda en nada cuando no tiene excesivo reparo en enfrentarse a un texto en español y traducirlo al inglés con ayuda del diccionario Spanish-English, el cual podemos pensar que no parece desgastado tan solo por limpiarlo para que no acumule polvo.

La cuestión es que la disyuntiva o problemática que a Jessica se le plantea no es el hecho de ser un poco de conocimiento sin fondo o que se haya impuesto una serie de filtros o límites a esa curiosidad o impulso innato por aprender. Ella se resiste a hablar al verse expuesta ante los demás, porque se siente rara y ridícula.
Ana no la cree.
Se puede decir que a Ana no le convencen del todo sus argumentos y excusas, aunque se muestre condescendiente con su postura y haya una cierta permisividad por su parte. Que, si Jessica se toma esas libertades en el colegio, es porque se siente respaldada y que, dentro de lo que cabe, la pesadilla con Ana resulta mucho más llevadera.
De manera que no, Ana no se cree los engaños de Jessica, aunque disimule ante ésta y no la presione demasiado al respecto. Como ya hemos visto, de vez en cuando la sorprende con alguna actividad extra, no tanto por esperar su reacción en contra, como por el hecho de dejar en evidencia sus avances, sus progresos, que esa confianza es de doble sentido.
Ana, aparte de su tutora, es educadora social, es decir, tiene la misión de encauzar su vida en la buena dirección, entendiendo que el caso de Jessica se puede considerar de los difíciles por este y otros muchos aspectos a tener en cuenta. Nada demasiado grave, pero sí bastante importante como para que Jessica se sienta bloqueada.
Si Jessica se resiste a ese acercamiento a la cultura española, al conocimiento del idioma español o de todo lo referente a Toledo, siempre se puede buscar una vía sutil y alternativa.
“According to centuries-old custom, a salve to the Virgin of Hope was sung at St. Luke’s Church on Saturday afternoon.”
Toledo puede considerarse una de las ciudades españolas con mayor número de leyendas debido a su amplia riqueza histórica. Uno de sus templos, la iglesia de San Lucas, fue testigo impasible de uno de los misterios más populares de la ciudad.

Gracias a esas sutilezas de Ana, nos convertiremos, junto a Jessica, en exploradores de una ciudad, de una historia, que va más allá de los libros.
Origen
- Esperando a mi Daddy. Monday, June 20, 1994
- Reflexiones personales
- Don Diego de la Salve – Tras el último verso
- En rito mozárabe, Iglesia de San Lucas —tras el último verso

Debe estar conectado para enviar un comentario.