Me debes un día de campo

Introducción

Sábado, 27 de septiembre 2003

Ana: Marchémonos. – Le contesté resignada. – Pero que conste que me debes un día de campo.

Ana

Manuel: Será mejor que nos vayamos al piso.- Le aconsejé.- De todas maneras, hemos de coger el coche.

Manuel

Relajados

Manuel se ha mostrado dispuesto a acudir a la boda de Carlos. Asistirá como la pareja y el acompañante de Ana, dispuesto a robarle el protagonismo a los novios por ser él quien lleve del brazo a quien en su día fue la novia de Carlos, aunque o haya por parte de ellos ninguna mala intención ni pretensión en ese sentido. Aquella historia ya forma parte del pasado de Ana y se supone que ya está superada y olvidada.

Su «Don Excusas», esta vez se muestra dispuesto a acudir a un evento social, a la boda, por lo cual Ana se siente relajada. No hay motivo para agobiarse ni preocuparse sin necesidad. Manuel se muestra dispuesto a acudir a la boda y no ha puesto ningún reparo.

Es lógico pensar que Manuel tiene claro que sabe lo que ello implica y que no tiene pensado acudir con el aspecto desliñado que tiene en esos momentos, dado que tampoco es cuestión de que se ponga en ridículo ni en evidencia delante de todo el mundo.

Aspecto de Manuel en el chalé// Copilot designer

¿Planes planes para hoy?

Y ya que Manuel se muestra relajado y Ana tampoco pretende desaprovechar el día, consciente de que su visita ha sido del todo inesperada, se muestra dispuesta a participar en los planes de Manuel. Siente curiosidad por saber cómo son los sábados en la vida de su novio.

Chalé de los padres de Manuel// Copilot designer

Que si hay que pasar el día en el campo, ella no tiene ningún reparo. su única prisa es la de no regresar a su casa demasiado tarde, pero hasta que sea hora de marcharse tiene por delante toda la eternidad, quiere que sea verdad eso de que cuando ambos están juntos es como si se detuviera el tiempo.

Ana es una chica de ciudad, desde que trabaja se pasa mucho tiempo encerada en su despacho de la gestoría sin ver la luz del sol ni tomar el aire, por lo cual se ha tomado esta escapada como la oportunidad de pasar un día de campo junto al amor de su vida, aparte que tiene que concretar los detalles de la asistencia a la boda y cuanto más relajados estén mejor

Ana con aspecto serio (imagen oficiosa para la web) // Copilot designer

Como se supone que están en el chalé de los padres de Manuel, aunque sea la segunda residencia de la familia, este se tiene que sentir allí como en casa, que ha ido a pasar el día porque tiene que ocuparse del riego y de perro, que en principio no tiene otros planes ni compromisos para este último sábado de mes, porque al haber un encuentro nacional por parte del grupo, no habrá la reunión semanal en la parroquia.

Ana presupone que ante la idea de que éste se siente como en casa, tampoco tiene motivos para inquietarse, aparte que al no haber ido hasta allí en coche, hasta la llegada de Ana, su horario dependía del autobús. para Ana lo de ir al campo implica pasar todo el día en el campo, desde primera hora de la mañana hasta el atardecer.

Sin embargo, su «don Excusas» vuelve a hacer gala de su personalidad. No se pueden quedar a comer en el chalé porque no hay que comer o lo que hay está congelado y reservado para una mejor ocasión. Ana fue mucho más previsora en cuanto a la cena la primera noche de la convivencia de novios y pensó en los dos. Pero Manuel no ha pensado ni siquiera en sí mismo.

Una chica con soluciones

Frente a lo que parece un improvisado día de campo en el chalé, sobre todo porque Manuel no contaba con que Ana se presentase allí sin previo aviso, Ana se presenta como una chica previsora y preparada para este tipo de contingencias. Ella sí sabía a lo que iba, aunque no supiera muy bien con lo que se iba a encontrar.

Aunque el chalé cuente con piscina, ella no se ha traído el bañador, aparte que tampoco se esperaba que aún fuera a estar funcionando, que no lo está. Además, aún no se siente lo bastante cómplice y confiada con Manuel como para mostrarse tan natural, menos aun estando los dos solos. Que se trata más de proteger su integridad, del respeto propio, que del hecho de temer que Manuel pudiera mostrarse demasiado impulsivo.

Lo que sí se ha traído es comida, siendo tan previsora como siempre, pero esta vez Manuel no se muestra demasiado animado a compartir, a abusar de su generosidad

Ana también alude al hecho de que ha visto un bar junto al desvío de la autovía por la que se accede se accede hasta allí, de manera que lo propone como alternativa. pero tendrían que ir hasta allí dando un paseo o, por abreviar, en el coche.

Si se tienen que montar en el coche y ya que se ponen en camino, la mejor alternativa es que se marchen a Toledo, al piso, donde Manuel entiende que los dos pueden sentirse mucho más cómodos, que en ese sentido no tiene reparo en invitarla a su casa y allí, si a Ana le parece bien, compartir la comida que ella haya traído

Ana con aspecto alegre (imagen oficiosa para la web) // Copilot designer

Incomodidades

De las objeciones de Manuel se puede entender que aparte de que éste quiera seguir con sus planes y se sienta contrariado por la visita de Manuel, se puede entender que se sienta un tanto incómodo, que es consciente de que no va vestido como la ocasión requiere, que ello descuadra sus planes en cuanto a cómo debe ser una primera cita con su novia.

Para él las citas con Ana tiene que ser en Toledo, aparte que al estar el chalé ya cerrado, no resulta muy acogedor para recibir la visita de nadie. Aunque a Ana no parezcan importarle estos pequeños inconvenientes, él no está a gusto y pretende ofrecerle lo mejor que tiene, demostrarle que está a la altura de sus exigencias en cuento a los posibles pretendientes.

Manuel, si no pretende impresionar a «su chica», al menos quisiera que ésta no se sintiera demasiado defraudada por estas impresiones, como si aun tuviera presente el encuentro con los padres de ella y entendiera que éstos no piensan que él éste a su altura.

Manuel (imagen oficios para la web) // Copilot designer

En el piso de Toledo, él se puede asear y sentir un poco más presentable, recuperar su ser y la imagen con la que Ana le ha conocido. Intenta mejorar en algo la no muy buena impresión que le haya causado esta mañana, aunque se olvida que le ha ido que sí a asistir a la boda.

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