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Introducción
Como ya he comentado en alguna ocasión en Toledo se rodó la película «La Novena Puerta» (1999), protagonizada por Johnny Deep. Y como a nosotros nos gusta eso de llamar a todas las puertas, pues ¿Qué os parece si nos dedicamos ello en esta calle y plaza?

La Novena puerta. Johnny Deep
Escena de la película «La Novena puerta»
El nombre de la calle parece derivarse de los seis registros subterráneos o aljibes que afloran en su pavimento, entre el convento de Santo Domingo el Real y el de las Capuchinas. Dichos registros se dedicaban a recoger las aguas pluviales de los extensos tejados de los conventos indicados. En 1776 se llamaba igual que hoy la calle. (Fuente: Historia de las Calles de Toledo)
Calle de Buzones, 2

El número que nos ocupa tiene portada en piedra simulando el despiece. Dintel y pilastras con piedras enteras, ladrillo sencillo y esgrafiado. Blasón de traza renacentista, posiblemente de primera mitad del S. XVI, que nos evidencia un antiguo propietario no vinculado, como la mayoría de la manzana, al convento de las Capuchinas.

No se conservan muchos rasgos característicos de los que pudo ser esta vivienda nobiliaria, aunque el tamaño general y el blasón de su portada nos permiten reconstruir un pasado mejor. El inmueble está en estado de conservación aceptable. La ocupación de la esquina de la calle de la Merced por un enorme hueco de una tienda de ultramarinos afea notablemente su portada. El revoco está en mal estado y los huecos que se rasgaron a la hora de reconvertir y “embellecer” sus fachadas en el siglo anterior, no tuvieron el cuidado necesario y dañaron, por ejemplo, la portada principal. Puerta de entrada, de dos hojas, en madera claveteada, rematando encima un balcón.
Entrando al zaguán, se suben tres escalones que dan acceso al patio. Patio casi de forma cuadrada, de 6,5 x 5 m, sin columnas ni pilares de apoyo, suelo embaldosado, fuente central de cerámica decorada con ranas y zócalo de vistosos azulejos. Pozo de granito con brocal, en una esquina. En el patio, se aprecia en buen estado el artesonado y vigas de madera, con canecillos. Sobre ello descansa la planta superior que presenta en sus laterales balaustrada en madera y cerramiento interior acristalado. Tuvo una importante rehabilitación que finalizó a finales del año 2020. Actualmente está habitada por varias familias. (Textos: Juan Meneses Revenga)
Cercano a esta calle, al final, atravesando la plaza que lleva su mismo nombre, llegamos a la plaza de Santo Domingo el Real, lugar donde se escribió la leyenda:
La Voz del Silencio atribuida a Gustavo Adolfo Bécquer. “… un viejo judío que tiene su puesto de quincalla frente a la vieja casa en que sonó la misteriosa voz, me contó que dicha casa está deshabitada desde hace mucho tiempo. Vivía en ella una bellísima mujer acompañada de su esposo, un avaro mercader de mucha más edad que ella. Un día el mercader salió de la casa cerrando la puerta con llave, y no volvió a saberse de él ni de su hermosa mujer. La leyenda cuenta que desde entonces todas las noches un fantasma blanco con formas de mujer vaga por el ruinoso caserón, y se escuchan confusas voces mezcladas de maldición y lamento”.
Plaza de los buzones

Plaza de los Buzones, 2

El arco de Buzones
Durante la intervención arqueológica que se llevó a cabo en el inmueble de la Plaza de los Buzones nº 8 se pudo documentar, en la medianería con el inmueble contiguo, un arco de herradura realizado en ladrillo, que se correspondía con el acceso a una casa de época islámica que podemos fechar en época Califal (entre los siglos IX y X de nuestra era).

Aunque ahora lo vemos en el interior de una vivienda, éste espacio fue en su día una calle o un posible adarve (callejón) público.

Será en época Mudéjar, entre los siglos XIII y XIV, cuando esa vía pública se privatice para levantar un inmueble con dos crujías (cada espacio alargado del inmueble alrededor de un patio se denomina crujía) y patio central. En éste momento, el dueño del anterior inmueble cegaría el arco, tal y como se ha conservado hasta hoy.

Nacela con inscripción de escritura cúfica, situada por encima de la clave del arco al que hace referencia esta entrada. Cara interior del arco, Plaza de Buzones nº 8, Toledo. Fotografía: Pedro Pablo Salvador Hernández. Consorcio de la Ciudad de Toledo..
El Arco de Buzones, Toledo – Paperblog

El arco fue salvajemente destrozado hace pocos años por un insensible promotor que «rehabilitó» el edificio. Ahora, ya restaurado de verdad, aparece discreto, no parece antiguo, su cara visible real desapareció para siempre. Ahora hay una segunda oportunidad, ella va intervenir en la otra cara del arco y todavía quedan en él restos del acabado original..
El Arco de Buzones, Toledo – Paperblog
Plaza de los Buzones, 9
Casa toledana antigua con puerta conservada, escudo, patio, cueva.





Plaza de Buzones, 5 “Convento”
Este patio-claustro se encuentra situado en la plaza de Buzones, 5 “Convento de Santo Domingo El Real”
Al patio del Moral se accede por la calle de Buzones, La portada original fue de un antiguo palacio del siglo XIV, después reconvertida en el siglo XV adaptada al monasterio, encima de su puerta, en una hornacina, se halla una imagen de madera de Santo Domingo.
Entrada en el blog (Plaza y…. acción)
El monasterio de amplias dimensiones fundado por Inés García de Meneses, viuda del alguacil Sanz de Velasco, allá por el año de 1364 está ubicado en una de las zonas con más sabor de esta capital, ha permanecido a lo largo de los siglos bien asentado a pesar de los avatares que en la historia se han sucedido. Los siglos XIV y XV representan por una parte la culminación en las relaciones entre convento y monarquía que llevarían a aquel a convertirse en lugar de recogimiento de infantas y otras señoras ligadas directamente con las casas reales de Castilla y Aragón; por otra, es época en la que se alcanza un gran esplendor en todos los campos, incluyéndose el artístico del cual aun restan notables testimonios como el coro o el patio del Moral.
En la segunda mitad del siglo XV residió en este convento Santa Beatriz de Silva, fundadora de la Orden de las Concepcionistas. Santo Domingo le pareció el lugar adecuado y durante 34 años convivió con las religiosas haciendo una vida devota en la que fraguó su idea de crear una orden dedicada a la Inmaculada Concepción a la que tantos favores debía. En el siglo XVI la comunidad siguió siendo un notable mecenas para el que trabajaron artistas de gran renombre tales como Juan de Borgoña, Diego Velasco de Ávila, Juan Bautista Monegro, y otros tantos que trabajaron para instituciones de tanta relevancia como la Catedral Primada o los monarcas reinantes.
Dado su gran espacio, el convento tiene también acceso por la plaza de Santo Domingo el Real. Llama la atención el exterior de la iglesia, con pórtico renacentista de 1565, edificado sobre cuatro columnas de piedra con capiteles de estilo dórico-toscano con altos basamentos, soportando un tejado de vigas de madera y cubierta con teja árabe; es de armónicas y elegantes proporciones, aunque hayan desaparecido las esculturas que en otro tiempo tuvo. Además, se emprendieron otras obras durante esa época como son el claustro de la Mona (en la actualidad propiedad de la comunidad de las Comendadoras de Santiago).
En los siglos XVII y XVIII se inicia una inexorable decadencia como ocurre en general con Toledo, en el número de religiosas. No obstante, todavía en estas centurias la vida dentro de los muros que constituyen Santo Domingo el Real sigue siendo esplendorosa tanto en espiritualidad como en trabajos emprendidos por las monjas.
Durante el siglo XIX y a partir de ocupación francesa, Santo Domingo sufre un buen número de percances, si bien no influyeron en la calidad de la vida en común, sí tuvieron funestas consecuencias en lo que atañe al patrimonio y bienes del monasterio que se fueron perdiendo a lo largo de esta centuria. La Desamortización de Mendizábal no solo privó a las dominicas de sus fincas urbanas y rústicas, también supuso un aldabonazo en otras propiedades, tales como objetos artísticos, que debieron ponerse en venta para la pervivencia de una comunidad que llegó de esta manera a una extrema pobreza. Esta situación llegó a su cenit en 1934, cuando por varios impagos de la contribución por falta de medios, todo el conjunto arquitectónico estuvo a punto de venderse en subasta pública. (Fuente: Dominicos).
El núcleo primitivo se hallaba en torno al patio del Moral. En origen, se trata de un patio civil toledano similar al patio de la Enfermería del convento de Santa Isabel de los Reyes. Se transformó en dependencia cenobítica al mismo tiempo que algunas estancias anejas conocidas como “palacios”. En la actualidad está dividido en dos zonas por el corredor construido en el siglo XVII. La más antigua es la ocupada hoy por las dominicas, mientras que la otra parte, junto con otras estancias, se alquiló a la Administración (Catastro – Gerencia Regional De Castilla-La Mancha).


Web de referencia
Buzones, 2 Calle de (patiosdetoledo.es)
Buzones, 5 Plaza de «Convento» (patiosdetoledo.es)
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