Introducción
Tras enterarme de la historia real que hay tras la canción «Amiga mía» de Alejandro Sanz y dado que a nivel de la novela «Silencio en tus labios», lo vinculo y relaciono con «El poeta», ese amigo anónimo que Ana ha encontrado con ese chat de citas, me reafirmo en ese planteamiento.
Por lo que se cuenta de la canción, Alejandro Sanz tenía una amiga que le contaba sus penas con respecto a su historia de amor con un amigo en común; que, de algún modo, Alejandro Sanz se convertía en el paño de lágrimas de esta chica, sin que tampoco pudiera decir ni hacer mucho más por apoyarla que escucharla.
Esta amiga se molesta un poco con el cantante por utilizar esas confidencias de amigos para componer esta canción, de manera que en la versión final es más como una petición de perdón por contar su historia.
El amigo de Ana
En la novela es Ana quien necesita un desahogo, alguien con quien compartir sus impresiones y frustraciones con respecto a Manuel. Pero sin que nadie más se entere, por lo que le ruega a «El Poeta» que sea discreto, que no utilice estas confidencias para intentar descubrir su identidad.
En un primer momento, Manuel es un chico que le intriga y, hasta cierto punto, desespera a partes iguales, porque, al principio, es un chico a quien tiene curiosidad por conocer:
- ¿Por qué no acudió al campamento de verano del año 2000?
- ¿Qué es eso de que se relaciona mal con las chicas del grupo?
- ¿Qué hace un chico como él en un grupo como éste?
Pero se suele decir que la curiosidad mató al gato y Manuel se da cuenta de que Ana le observa desde la distancia. Hasta cierto punto su discreción no llega a ser tan discreta como ella pretende, porque ese interés por Manuel no es más que una distracción que ella se ha buscado para evadirse de sus propios problemas y encontrar una justificación para estar ahí.
Ya que a Manuel no lo puede mandar a hacer gárgaras sin más, aunque le deje las cosas claras desde un primer momento, porque no es muy propio de la mentalidad ni del carisma del grupo, de ser una buena persona, recurre a este anónimo amigo para sacar de su cabeza todos esos pensamientos y sentimientos poco favorecedores.
Ana habla con las amigas, con su director espiritual, entendemos que también con su madre, que prácticamente todos aquellos con quienes tiene la suficiente confianza saben de sus tormentos, porque se encuentran en su entorno más cercano, demasiado cercano.
Sin embargo, a «El poeta», sea quien sea y viva donde viva, no le conoce tanto porque su trato y amistad se basa en ese anonimato, en contarse las cosas casi sin esperar respuesta y sin dar demasiados detalles, no vaya a ser que se descubran el uno al otro y se pierda la magia.
La respuesta de El poeta
¿Qué hace Ana contándole sus penas a un extraño? En principio huir de sus propios agobios, que aquello que simplemente podría plasmar por escrito y mandar a la basura, ella prefiere enviarlo por correo electrónico, aun siendo consciente de que no esté dando una buena imagen de sí misma.
Lo positivo es que «El poeta» por lo general no suele responder a esos mensaje:
- ¿Quién será, en realidad, esta loca?
- ¿Quién será ese chico que la tiene tan atormentada?
- ¡Qué mal concepto tiene de los hombres en general y de uno en particular!
- De ese mal pensar sobre los chicos, los hombres, tan solo se salva uno «El poeta»
Lo positivo es que en las contadas ocasiones en que «El Poeta» le responde parece comprenderla a la perfección, ser su alma gemela, porque éste también parece vivir atormentado por la relación que mantiene con una amiga con quien no se termina de entender.
- ¿Quién será esa chica?
- ¿Se puede crear una asociación para chicas desesperadas por la actitud de los chicos? Al menos tendría dos miembros.
Sin embargo, «El Poeta», en vez de criticar a su amiga o mostrarse crítico con las palabras y actitud de Ana hacia ese chico que la tiene tan agobiada, se muestra y solidariza con él. Es como si «El Poeta» intentase justificarse, como si en vez de resolver sus propios problemas, utilizara a Ana para explicarse ante su amiga.
¿El final de la historia?
El supuesto final de la historia, de la relación entre Ana y «El Poeta», se produce cuando parece que la relación entre Manuel y Ana se normaliza, empiezan a dar sus primeros pasos hacia la formación de esa pareja de novios.
Ana necesita comprometerse en serio y con esa mentalidad no le encuentra mucho sentido que haya terceras personas y menos aún ir por ahí contando intimidades, aparte que con ello pretende dejar claro que su interés personal por este anónimo amigo de ese chat de citas no va más allá. Nunca ha querido darle esperanzas ni motivo para que se hiciera ilusiones.
Prefiere aportar por lo que entiende es un amor sincero y verdadero, aunque termine por desvelar la identidad de su misterioso amigo y le quede la duda de saber si ella también ha sido descubierta
Tras el último verso 
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