¿Sabes? Estoy algo preocupada por Daddy, por eso de que se haya tomado en serio esto del “secuestro literario”, que cada vez que quiera contarte algo, escribir en el blog, en vez de ser él quien lo haga, me deja a mí todo el trabajo.

Lo cual me parece que es como si quisiera tenerme entretenida mientras él hace un túnel en su celda mental y buscar una salida para recuperar el control de su obra literaria. También puede que se trate de simple vagancia, de desidia, para que sea otro quien le haga todo el trabajo y él se lleve todo el mérito. ¿Para quién va a ser, si no?

¡Qué listo Daddy! ¡Como sabe que nadie le va a protestar ni se le va a quejar!

¿Quién va a defender los derechos de los personajes de sus creaciones literarias? Pues claro, no tenemos. Ni tan siguiera le podemos reclamar derechos de autor; exigir un contrato de trabajo con unas condiciones dignas y acordes a la legislación vigente, con el Estatuto de los Trabajadores; con una retribución justa, un horario compatible con nuestra vida familiar, de conciliación, con vacaciones pagadas y todo eso.

Por no poder, no podemos ni afiliarnos al Sindicato de personajes de sus novelas, dado que primero tendría que inventárselo y no se le ve mucha intención en ese sentido, porque sabe que llevaría las de perder, si nos pudiéramos en huelga.

¿Te imaginas? Si nos ponemos en huelga, todas sus novelas serían paisajes inertes, desérticos, vacíos de contenido; descripciones de una piedra en mitad de ninguna parte a la que no le pase nada. Y como Daddy es de los que necesita trescientas páginas y media para escribir cómo cualquiera de nosotros abre una puerta, sin exagerar demasiado, porque eso parece en que en sus novelas es lo que le da a todo mucho sentido, lo de describir un paisaje blanco, vacío, con una única piedra como protagonista y actor, puede llegar a ser lo más aburrido del mundo.

Como estoy preocupada, pues me ha dado por investigar, por consultarles a mis amigos. A los suyos entiendo que también debería, pero claro, no es tan sencillo como parece y tampoco quiero comprometerle ni meter la pata por acusarle de algo que quizá tan solo sean divagaciones mías, aunque él argumentará que son suyas. ¡Cómo nos pongamos a discutir, alguno pensará que Daddy habla solo o que es absurdo esto de pelearse consigo mismo por una tontería! ¡Sería de locos!

Y no, por lo que yo sé, aún no le hace falta una camisa de fuerza ni una habitación blanca acolchada. De manera que no le pidáis de momento cita, ni habitación, en la Unidad de Salud mental del Hospital Provincial de Toledo (Subida del Hospital, 27, 45006 Toledo) Es el que está junto al Castillo de San Servando y la Academia de Infantería, desde donde se disfrutan de unas hermosas vistas de la ciudad de Toledo. Aunque, si le tuvieran que ingresar, no creo que en su habitación debiera haber ventanas.

La opinión de mis amigos

• A Ana le he preguntado si lo que tiene Daddy es un Trastorno de identidad disociativo, ya que dicho trastorno se caracteriza por la existencia de dos o más identidades en una persona, cada una con su propio patrón de percibir y actuar con el ambiente.
  • Se supone que Ana entiende de esos trastornos debido a su profesión, aunque quizás ésta sería una problemática para la que se vea superada. Ana está más especialidad en problemas de la infancia y la adolescencia. Lo de los problemas de personalidad en adultos, problemas psiquiátricos, requiere de una atención más especializada.
  • En todo caso, desde su punto de vista, queda descartado que se trate de eso. Casi segura de que no. Todos sabemos los problemas o conflictos que Daddy puede tener, pero ninguno cumple con los requisitos para que se pueda pensar que, además, tenga problemas de personalidad múltiple. Como mucho, puede que sea un recurso personal para no expresar sus verdaderos pensamientos ni sentimientos, que se esconde. ¡Él sabrá por qué!

• Yuly es de la que piensa que los chicos en general, y los españoles no son la excepción, son capaces de hacer demasiadas tonterías por llamar la atención. Porque resulta mucho más atractivo eso de guardar las apariencias, hacerse los interesantes, crear el misterio, con idea de destacar, – ¡Ay, qué pillín! –
  • Bueno, la verdad es que Yuly se ha puesto en plan sabelotodo y me ha dicho que tal vez se trate de una técnica literaria. Eso del narrador múltiple, en la que una misma historia se cuenta desde diferentes personajes que van alternándose en el texto y ofrecen una versión personal de los hechos. Que Daddy tan solo se las está dando de escritor profesional y nos utiliza a nosotros, en particular a mí, para contar su propia historia, pensando que es tan buen escritor que nadie se va a percatar del engaño.
  • ¡Cómo si fuera tan fácil eso de empatizar, de ponerse en los zapatos de otra persona y hacer creer a todo el mundo que quien escribe todo esto es una chica! ¿Acaso alguien se puede creer que los posibles lectores de este post, o de la web, son medio tontos, (sin que yo quiera ofender a nadie)?
  • En todo caso, Yuly es la que entiende de chicos españoles y de Literatura española, aunque lo suyo sea más la Biología. Pero, a fin de cuentas, los chicos son seres vivos, un conjunto de células, con alguna a la que se puede llamar “neurona” y que no sabemos si les funciona.

• De mis amigas, sin duda, Luz es la más seria. Según ella, tan solo es una peculiaridad de Daddy y tampoco es algo a lo que le deba dar excesiva importancia; que los chicos, los hombres, tienen sus fases y cada cual lo manifiesta a su manera.
  • Lo importante es cómo yo quiera valorarlo, cómo me afecte. Si considero que ello es perjudicial para él o, por el contrario, es algo que le ayuda a salir de su mundo interior, aunque sea con una pequeña mentira. Porque, la verdad es que él mismo reconoce que estas últimas semanas no escribe en primera persona porque se siente más cómodo asumiendo este narrador femenino. ¡Qué trabaje Jessica! (¡Será vago!)
  • Lo malo sería que lo hiciera de manera inconsciente o no le importara. Según Luz, Daddy, «mi Daddy», tan solo está explorando su vena creativa, haciéndose un hombre. De todos modos, me ha asegurado que ella, en ocasiones, también se ve en la tesitura de frenar a Jack en sus locuras empresariales, pero, en el fondo, le hace gracia eso de que su novio tenga esas locuras por dárselas de machote. ¡Está enamorada!

• Y hablando del rey de Roma, (‘speak of the devil’, como diría Sharon con toda complicidad o malvada jocosidad) me aprovecho de que Jack también anda por aquí para consultarle mis dudas.
  • Él, que entiende de esto de los negocios, de las inversiones un poco alocadas, como no puede ser de otro modo, me lo plantea desde un punto de vista comercial, partiendo de la hipótesis de que eso de ser capaz de hacerse pasar por otra persona, de mostrarse como alguien imaginativo, creativo, organizado, porque se supone que detrás de todo esto hay algún plan, es posible que sea algo más que un mero entretenimiento; que es algo así como si hubiera puesto en la puerta, de no sé muy bien dónde, un cartel de “Se vende” en referencia a sí mismo.
  • Aunque yo creo que el cartel lo ha colocado al revés, con el anverso de cara a la pared. Esto es algo así como un juego de rol, en donde la tecnología no está en el ordenador, si no en su propia cabeza. Que es como si se hubiera creado un avatar, de esos de realidad virtual, al que le hubiera dado una identidad propia, que en vez de dedicarse a matar bichos o recorrer territorios inexplorados en la pantalla del ordenador, se dedica a escribir lo que a Daddy se le pasa por la cabeza. Menos mal que en este juego no se pierden vidas.

• A Pete le preguntaría, pero es que ha salido a entrenar y él no sé entromete en asuntos que no son de su incumbencia. Entiendo que Daddy tampoco ha demostrado demasiado interés por consultarle. Quizá lo que éste me propondría es que nos echásemos una carreras y mueva el culo de la silla porque se me va a quedar plano. A ver si le pillo en un momento en que esté un poco más relajado, porque, en el fondo, es un chico con quien se pueden llegar a tener conversaciones muy interesantes. Él ha corrido mucho mundo, es un peregrino nato.

• Bowie ha dicho que “guau. Wow, wow.» Es un buen perro y no muerde, salvo que se sienta atacado.

• David, el father Catcher, el cowboy priest mas rápido a este lado del Mystic River, también anda un tanto ocupado, pero ya le pediré consejo espiritual la próxima vez que hablemos

¿Qué te parece? ¿Le pregunto a Sharon?

¿De cuánto tiempo dispones?

Si acaso, yo me quedo aquí hablando con ella y en otro momento os hago un resumen de todo lo que me cuente. No tomaré apuntes, pero recogeré las ideas principales, a ver si coincide con algo de lo que los demás me han contado hasta ahora, porque yo tampoco creo que se trate de un problema psiquiátrico, aunque sí pueda ser un truco para expresarse, para convencerse así mismo de sus propias cualidades, o de las mías, para romper su silencio.

En cualquier caso, estoy segura de que Sharon tiene argumentos incluso para rebatirse a sí misma.

En lo referente al tema chicos, estoy segura de que también tiene mucho que contarme (¡La vuelven loquita! A ver si le encontramos un novio pronto.)

Lo de la Literatura le aburre un poco, aunque los libros tengan muchos palabras y den para muchas horas de conversación.

Si esto es por darle conversación a ella, yo creo que tarda poco en hacerle un hueco a Daddy en su apretada agenda y así se pueden pasar un par de horas hablando de lo que sea. Ella está dispuesta a enseñarle cómo se expresan las chicas, a que le dé ese toque femenino a todo lo que escribe, si conmigo no tiene bastante, aunque ya sabe que es «mi Daddy».

Con respecto a lo de pretender que esto sea un modo de ganarse la vida, habría que discutirlo; valorar los pros y los contras, si Daddy tiene de verdad cualidades y vocación para ser escritor, si esta cualidad suya puede llegar a ser del interés de alguien.

En cualquier caso: «¡GUAU! Lo que se llega a pensar de esto de tener dos narradores.»

20. octubre 2020