Introducción
Por la ruta más corta desde mi casa hasta la Casa de Ejercicios no se tardaba más de cinco minutos. Sin embargo, a pesar de lo tarde que se nos hacía, me pareció buena idea que diésemos un rodeo, una vuelta por el barrio, tal y como me hubiera hecho ilusión que hiciéramos en aquella visita del mes de mayo para la que me había dado plantón.
Estamos en la ciudad de Ana, en una capital de provincia situada a dos horas de coche de Toledo. Nuestra pareja de protagonistas, de enamorados, han salido de casa de Ana, se han montado en el coche de Ana, aunque es Manuel quien conduce y se dirigen hasta el centro de espiritualidad para asistir a la convivencia de novios.

Es de noche, Manuel no conoce la ciudad y es la primera vez que está al volante de ese coche. Sin embargo, Ana confía, se siente feliz y orgullosa de que «su chico«, haya viajado desde Toledo hasta el portal de su casa para reconquistarla y superar su primera crisis de pareja, pero, sobre todo, que frente al pesimismo del resto del mundo, frente a esas opiniones no siempre favorables, ella ha sabido descubrir en él sus muchas virtudes y sabe que nunca se verá defraudada.

Dado que Manuel no conoce la ciudad se deja llevar por las indicaciones de Ana. Supone que ésta conoce el camino y sabe adónde van, aunque convierta este paseo por la ciudad en una visita turística por su vida, llevándolo por todos esos rincones que considera importante para ella y que le ayuden a saber cómo es la verdadera y auténtica Ana.
El recorrido
Por allí estaba la panadería donde compraba el pan a diario; mi colegio; mi instituto; el parque donde jugaba de pequeña; donde quedaba con las amigas y por donde me gustaba pasear; el bar donde alguna que otra vez me reunía con las amigas a charlar; la tienda donde acostumbraba a comprarme la ropa. En definitiva, mi vida cotidiana, incluso nos acercamos por el edificio donde estaba la gestoría de mis padres, en la que trabajaba.

Todo es nuevo para Manuel, para darse cuenta de que, en realidad, se ha enamorado de una chica a quien apenas conoce o ha tenido ocasión de conocer en este momento. No porque ésta pretenda que cambie los sentimientos de su corazón, sino, más bien, para que se reafirme en ellos, para que entienda que Ana le está haciendo un hueco en su vida, para que se sienta parte de ella.
Le muestra esa vida que en diciembre, en aquella amenazadora carta, le advirtió que no intentase conocer, que aquel era su mundo y él era una visita non grata, ¡que ni se le ocurriera apuntarse a aquella convivencia de Navidad! A la que por otro lado él tampoco se había planteado acudir, por mucho que para aquellas fechas no tuviera mejores planes.
Ésta son la visita y el recorrido que, de algún modo, Ana había planificado para esa primera cita de mayo, a la que, por tener otros planes, Manuel había rehusado acudir y había provocado su primera crisis de pareja.
Ahora Manuel está allí y no tiene escapatoria. Ella quiere que la conozca, que no haya secretos entre ellos, al menos en ese sentido. En cierto modo es como una presentación en con doble intención, para que Manuel conozca la ciudad y para que la ciudad conozca a Manuel, aunque sea de pasada y porque no se bajan del coche, ya que llevan algo de prisa. Van con el tiempo justo, a riesgo de encontrarse con la puerta del centro de espiritualidad cerradas a cal y canto, porque no se trata de un hotel, sino de un centro de oración.
Queda algo pendiente
Hay una cuestión que se deja sin resolver en la novela y que, sin embargo, tiene toda su relevancia, algo que se dice casi al comienzo de la novela, es ese primer encuentro entre ellos
La impresión que me causó la verdad es que no fue muy distinta a la que recordaba de la primera ocasión, era tan solo un chico más dentro del grupo y seguía sin novia. Era el de siempre.
Es decir, a pesar del tiempo que uno y otro llevaba como miembro del Movimiento, aquella era la primera vez que coincidíamos o, al menos, en la que éramos conscientes de ello,
Sabemos que de manera «oficial» Ana supo por primera vez de Manuel en el campamento de verano de ese año, 20020, porque a ella le había correspondido ser su amiga invisible, pero éste no había acudido. Sin embargo, por lo que se da entender en la novela, debió haber una ocasión anterior. Algo sucedido años atrás que sin embargo a Ana le causó una cierta impresión.
Manuel llega a mencionar que quizá coincidieran en alguna de las actividades del grupo. Entendemos de cuando éste no tenía tanto reparo a participar de ello fuera de Toledo, pero donde ya hacía gala de lo peculiar de su personalidad, sin que por aquel entonces Ana fuese alguien que le llamase la atención de manera particular.
Debió ser en una época en la que Ana tuviera interés en conocer a la gente del grupo, aunque, por lo que también se cuenta en la novela, la relación de Ana con la gente del grupo viene propiciada por la relación de ésta con su ex, con Carlos, por lo que se entiende que durante años ha pesado demasiado eso de que haya una distancia de dos horas de coche entre esta ciudad y Toledo.
Lo que se dice en este recorrido es que Ana ha ido a la universidad, pero fuera de su ciudad. De hecho, se puede argumentar esa época de su vida en la que de algún modo su vida ha estado menos vinculada a estos movimientos juveniles; años en los que le ha dado más prioridad a los estudios que a su vida social, aun a pesar de ese noviazgo con Carlos, quien sabemos ha sido un chico muy implicado
No pude aludir a mi etapa universitaria porque ésta había sido en otra ciudad y, de hecho, Manuel no me hizo ninguna mención al respecto, por lo que supuse que daba por sentado que sabía que mis padres no me tenían en la gestoría como chica de los recados ni como una simple secretaria.
Ana no es «la de siempre»
Ese referirse a Manuel como que «era el de siempre», no lleva a pensar que en la vida de Ana ha habido cambios significativos, aunque en este recorrido por la ciudad no se destaque ninguno, más que el hecho de la vida de Ana ha sido bastante normal y típica, en una chica de buena familia.
Manuel no parece recordar haber coincidido con ella porque Ana es una chica que ha cambiado con los años, ha pasado por una relación de pareja frustrada, lleva varios años padeciendo esa enfermedad que en ocasiones la obliga a guardar reposo y sobre todo ha crecido a nivel personal, porque ahora es una mujer trabajadora que se ha sabido ganar su lugar en el mundo, en su entorno.

Debe estar conectado para enviar un comentario.