10:24 AM. MHS Classroom Spanish
Llegamos al aula de Spanish y nos encontramos a todo el mundo en la puerta, en el pasillo, porque Mr. Bacon no permite la entrada a nadie, como si nos esperase para trasladar la clase a otra parte porque este aula no se puede utilizar y no quiere que nadie se pierda por el camino. Aunque siendo el día en que disponemos de menos tiempo me sorprende un poco que no nos hayan avisado con un poco más de antelación. Ya que, si hemos de perder tiempo yendo de aquí para allá, cuando nos sentemos será casi la hora de levantarse. Salvo que le quiera robar minutos a la hora del descanso. Pero entonces seremos los únicos que salgamos tarde. Al menos nosotras dos después tenemos clase de Physical Education. Por lo cual, el tiempo que podríamos aprovechar para cambiarnos también se verá reducido, si no queremos que Mr. Ford se mosquee con las dos por tomarnos sus clases sin el suficiente interés y sin que, en realidad, podamos trasladar esa culpa a nadie porque conocemos el horario y se supone que sabemos lo que tenemos que hacer en cada momento.
Mr. Bacon: [Habla en español] Quien no hable español, hoy no entra en clase. – Nos dice con gesto serio y determinación
Yuly: [Habla en español] ¿Lo dices en serio? – Le pregunta con incredulidad y sin molestarse en traducir.
Mr. Bacon: [Habla en español] Completamente en serio. – Le responde con convicción. – Ya he me leído las redacciones que me habéis entregado y me parece que hay sitios mejores donde perder el tiempo que con esta signatura.
Yuly: [Habla en español] ¡Se supone que lo de las redacciones era algo privado! – Alega. – ¡Quien no entre en clase está suspenso y se pondrá en evidencia delante de todos! – Argumenta con vergüenza propia y ajena.
Mr. Bacon: [Habla en español] Quien quiera asistir a mi clase va a tener que entrar y escribir una redacción sobre su seriedad con esta asignatura. – Nos dice. – Cada uno me dirá los criterios por los que espera ser evaluado. Si los cumplís, los tendré en cuenta a la hora de poneros la nota final de curso.
Yuly: [Habla en español] ¿Lo dice en serio? – Replica contrariada.
Mr. Bacon: [Habla en español] Asignatura de Spanish y diez criterios para que se os evalúe. – Le responde. – Así de simple. – Le dice en un tono más afable. – Quien no se quiera comprometer, se puede quedar en el pasillo.
Yuly: [Habla en español] ¿Y podemos conseguir una A+? – Le pregunta porque se teme que haya un suspenso general.
Mr. Bacon: [Habla en español] He de evaluar vuestra actitud y participación en clase, de modo que sí, este curso espero que haya muchas A+.- Le responde con optimismo.
Podría alegar que no me entero de lo que hablan y pedirle a Yuly que me traduzca, pero es quien mantienen este debate con el profesor y no puede estar a todo. En cualquier caso, entiendo que ésta es la consecuencia lógica a la redacción que le presentamos ayer y, en cierto modo, a mi actitud de esto primeros días. A que no quiere ser él quien cargue con la culpa ni responsabilidad de nuestros suspensos ni de que nos durmamos en clase, si nada de lo que se diga nos interesa. Todo esto, de algún modo, es por mí, porque es la misma postura mantenida por los profesores del St Francis School, que no le veían mucho sentido a que yo acudiera a sus clases, dado que me convertía en una distracción y mal referente para mis compañeros. De modo que el hecho de que me ausentara para ellos era un alivio. Sin embargo, no me creo que Mr. Bacon se vaya a permitir conmigo ese punto de dejadez ni que lo consienta por mi parte, dado que yo respondo de las consecuencias ante Ana. Si la pongo en la tesitura de tener que venir y cerciorarse que entro en clase y aprovecho el tiempo, le va a compensar más mandarme a Matignon High y delegar la responsabilidad a otro. Por lo cual, a la pregunta de si hablo o no español, si tengo al menos un mínimo de interés en asistir a esta clase, no cabe otra respuesta, que decir que sí. Aunque en el caso de que sea verdad que yo puedo fijar mis propios criterios de evaluación, tal vez me libre de ese casi certero suspenso.
Mr. Bacon: Entrad de uno en uno. En vuestro pupitre os he dejado un folio para que escribáis esos diez criterios de evaluación. – Nos indica. – Podéis escribirlo en el idioma que os apetezca, ya me buscaré yo un traductor de chino, si se diera el caso. – Añade con cierta complicidad. – Es lo único que haremos hoy.
Supongo que esto será como un examen sorpresa en el que no se evalúa nuestro conocimiento del idioma, si no, más bien nuestra disponibilidad a aprenderlo. Por lo cual se nos pide y se espera de cada uno la suficiente seriedad, la que Mr. Bacon no parece haber encontrado en la redacción sobre nuestras motivaciones. De hecho, por lo que Yuly me ha contado de lo que escribió ella, nosotras nos hemos merecido el suspenso. Ya que intentó dar una justificación y coherencia al hecho de que yo no hable español. Sino al hecho de que acuda a clase bajo la advertencia de que mi ausencia tendrá consecuencia. Porque la verdad es que a Ana tampoco le ha convencido ese planteamiento y me puedo sentir afortunada de que aún no me haya sugerido que empiece a recoger el dormitorio. Deduzco que en el caso de Mr. Bacon se me concede una segunda oportunidad. El curso aún está en sus primeros días y confía en que mi resistencia tiene un límite que no llegará hasta el mes de junio. Casi mejor que desde ya mismo empiece a dar muestras de debilidad. Pero no porque me sienta forzada a ello, sino por decisión y voluntad propia.
En lugar de ser la primera que encamine sus pasos hacia cualquier otro sitio del edificio, porque mi frase es “I do not speak Spanish”, me tengo que tragar mi orgullo, agachar la cabeza y esperar a que sea mi turno para entrar. Dado que, en realidad, no hay nadie que salga huyendo. No sé si porque asustan las consecuencias de ausentarse de clase o porque hay un verdadero interés en aprender y Mr. Bacon se está ganando el respeto de todos. Aunque no estoy muy segura de que todo el mundo entienda lo que espera que escribamos en ese folio, dado que no se trata de nuestras motivaciones ni como tal de una redacción libre sobre lo primero que se nos ocurra. Cada uno ha de establecer los criterios por lo que espera ser valorado en esta asignatura; por lo que se compromete y se siente capaz de cumplir. Pero, sobre todo, hemos de demostrar seriedad y olvidarnos de la ironía de las redacciones. En nuestro caso porque Yuly ha pretendido lucirse y demostrar todo lo que sabe, mientras que quedaba plasmada mi rebeldía y dejadez por aprender y aprovechar el tiempo.
Mr. Bacon: ¿Qué quieres que te pregunte? – Me interroga en tono afable e intención. – ¿Hablas español? ¿Te sabes el abecedario?
Jess: Sí. – Le respondo con timidez y en español, aunque me haya de tragar mi orgullo.
Mr. Bacon: Entonces, puedes pasar. – Me responde en español y con una sonrisa de aprobación.
Si entro en el aula, se supone que es porque espero que me evalúe como al resto. Porque espero que sea justo conmigo y no sea cierto eso de que estaré suspendida mientras no me atreva a hablar en español. Ya que lo que espero es poder darle diez criterios para que me puntúe de una manera justa. Aunque primero tendré pensar sobre ello y me ha pillado un tanto desprevenida. Pero dispongo de tiempo hasta que suene la campana para que se me ocurra algo con una mínima coherencia. Porque entiendo que Mr. Bacon no aceptará cualquier tontería que le escribamos. Ha dejado claro que he de ser sobre la asignatura y, como es lógico, que implique que aprovecharemos el tiempo. Que será una exigencia mínima que nosotros nos impongamos para ser merecedores de ese anhelado aprobado e incluso de que se nos permita la entrada en el aula y no terminemos en el despacho del director para que no sancionen por estar molestando.
En mi pupitre como en el de resto de mis compañeros me encuentro un folio, como si nos hubiera preparado un examen sorpresa, aunque no haya nada escrito ni tan siquiera en la pizarra. Aunque entiendo que las explicaciones que se nos debían dar las hemos recibido en el pasillo. Por cómo escriben aquellos que me han precedido, supongo que a todos nos ha quedado claro, Sin embargo, me temo que esta vez yo estoy escarmentada y segura de que Mr. Bacon no aceptará que le contemos con otra sarta de mentiras para justificarnos. Dudo bastante que nadie se vaya a ganar el aprobado por venir a calentar la silla, como me insinuó Yuly en otro día para justificar su planteamiento del trabajo. Ella se pasó de lista y tiene suerte de que los demás no sean conscientes de que la reacción de Mr. Bacon sea por nuestra culpa. Aunque es posible que los chicos tengan algo de culpa por causa de sus burlas, por la dichosa cancioncita. Dado que estoy convencida de que esa actitud les perjudica a ellos más que a mí, a pesar de que yo no pueda negar que me siento afectada.
Criterios de evaluación asignatura de Spanish
Curso: 1995-96
Grado: 9th
Alumna: Bond, Jessica Marie
1. Acudir a clase
2. Hacer los ejercicios
3. Buen comportamiento
4. Hacer los exámenes
5.
6.
7.
8.
9.
10.
A partir del cuarto punto ya no sé qué escribir y tampoco me quiero pasar de lista porque no sé si es lo que se espera o estoy siendo poco exigente conmigo misma, aunque es más o menos lo que Ana me ha recomendado. Sobre todo que no me falte a ninguna clase y lo de hacer los ejercicios es para justificar que no vengo a perder el tiempo. Tal vez debería comprometerme a estudiar todos los días, pero entiendo que eso se da por sobreentendido. Pero ello implicará que tendré que hojear más el libro de texto y no limitarme tan solo al libro de los ejercicios. Pero eso en sí supone una contradicción conmigo misma. Por mucho que se espere que me tome la asignatura en serio y me esfuerce todo lo posible dentro de mis capacidades. Porque pretendo conseguir algo más que un aprobado. Del resultado de esta asignatura depende la nota media del curso y, sobre todo, que se tomen o no medidas con respecto a mi estancia en el internado. Por otro lado, si lo incluyera en el listado y después no fuera capaz de cumplirlo, se me tomaría por una mentirosa y ya no podrían confiar en mí porque no cumplo con mi palabra. Aunque si espero que Ana lo haga. En su caso su lista de exigencias no es tan larga. Al menos no consta por escrito y tampoco me lo parece. Casi todo está relacionado con esta asignatura y con el hecho de que me esfuerce por abandonar mis malas costumbres, algunas de las cuales ya forman parte de mi pasado más lejano.
Yuly: (Le echa un rápido vistazo a mi lista) Apunta lo de ser participativa en clase; puntualidad, esforzarme por mejorar mi nivel de español.
5. Ser participativa en clase 6. Puntualidad 7. Esforzarme por mejorar mi nivel de español,
Jess: Gracias. – Le respondo. – Con eso tan solo me faltarían tres.
Yuly: Esforzarte por hablar español, escribir en español. – Me sugiere con intención.
Mr. Bacon: (Desde su mesa) Es una redacción individual. – Nos reprende. – Es casi como un examen y las notas no se comparten. Como mucho, se reparten. – Añade con clara intención.
Yuly: Perdón. – Se disculpa.
Mr. Bacon: Jessica, si tienes alguna duda, ven a la mesa y te ayudo. – Me dice.
Jess: Está todo bien, Gracias. – Le respondo para intentar salir del apuro.
Prefiero no mostrarle mi lista antes de tiempo porque sospecho que conmigo la tendrá demasiado en cuenta. Si incluyo eso de “hablar en español” estoy perdida. Aunque no se me ocurren otras alternativas menos comprometidas, dado que lo de escribir quizá me cohíba menos, siempre y cuando no se espere que lo personalice demasiado. Aunque Ana es de las que más me aconseja que no me reprima. Ya que, según ella, es como la lectura no comprensiva, pero con la particularidad de que soy yo quien he de plasmar por escrito las palabras que surgen en mi cabeza. Casi prefiero limitarme a copiar lo que leo y no pensar demasiado en ello, como pretendo hacer cuando lo copie los ejercicios a Yuly. Rellenaré el libro de manera casi mecánica para que nadie me acuse de no llevarlos hechos. A pesar de que Mr. Bacon ya me haya advertido que eso no será suficiente para que me aprueba. Pero tampoco podrá argumentar que hago nada en clase. Por lo que el término medio habrá de ser ese aprobado ajustado, que es lo mínimo que se me exige y con lo que me conformo.
8. Esforzarte por hablar español 9. Escribir en español. 10.
Mr. Bacon: Jessica. – Me llama. – ¿Te apetece compartir tu listado con tus compañeros? – Me propone. – Hoy se permite hablar en inglés.
Jess: No. – Le respondo con bastante seguridad, aunque muerta de vergüenza ante la expectativa.
Mr. Bacon: ¿Has incluido lo de ser más participativa en clase? – Me pregunta con intención.
Jess: Sí. – Le contesto.
Mr. Bacon: Pues, réstate diez puntos. – Me dice sin perder el tono cordial.
Jess: OK. – Le respondo resignada.
Mr. Bacon: ¿Has incluido algo referente a aprender el idioma? – Me pregunta. – Da igual si lo has escrito con tus palabras
Jess: Sí. – Le respondo.
Mr. Bacon: ¿Sabes hoy más español que el primer día de clase? – Me pregunta con gesto serio.
Jess: Creo que sí. – Le respondo un tanto cohibida.
Mr. Bacon: Pues, si te falta algún criterio por anotar, termina la lista. – Me indica en tono conciliador. – A los demás os digo lo mismo, Sois vosotros mismos quienes os aprobáis o suspendéis. Vosotros establecéis los criterios.
10. Aprender sobre la cultura en España
Mr. Bacon: ¿Yuly, puedes decirnos alguno de sus criterios de evaluación? – Le pregunta en español.
Yuly: Sí, por supuesto. – Le responde animada y en español. – Estudiar para conseguir la nota más alta.
Mr. Bacon: Eso sería, más bien, un objetivo. – Le corrige. – Pero te admito lo de estudiar, lo de tomarte las clases en serio. – Añade en tono conciliador. – Apúntate nueve puntos.
Yuly: ¿Tan solo nueve? – Le pregunta extrañada.
Mr. Bacon: Entiendo que los demás criterios están bien. – Le contesta para aclarar su posible contrariedad.
Yuly: Bueno, vale. – Le responde resignada, aunque no muy convencida.
Yuly es la segunda a quien pide sus criterio de evaluación. Los demás van después y con todos se detiene a hacerles una puntuación y primera evaluación para evitar que haya un exceso de confianza o de optimismo. Porque lo de acudir a clase para calentar la silla sigue sin ser algo que se admita y lo que deduzco es que Mr. Bacon intenta no verse prejuzgado de antemano y que nos hagamos responsables y consecuentes con nuestro esfuerzo. De manera que mi alivio es comprobar que no soy a la única a quien le resta punto en función del criterio que se ha buscado y que no pone en práctica desde ya mismo. Aunque nos dé la oportunidad de compensarlo con la mención a un segundo criterio un poco más factible, que no nos perjudique. En general, entiendo que todos hemos puestos los mismos, aunque con nuestras propias palabras e incluso intencionalidad, como ha sido el caso de Yuly. A pesar de que Mr. Bacon le haya dado a entender que no son lo mismo los criterios de evaluación que los objetivos. En todo caso se complementan. Es decir, que más me vale que me aplique el cuento porque si ni yo misma me tomo en serio aquello en lo que espero ser valorada, mis objetivos quedan un poco lejos.
Period Schedule Subject
Lunch 11:15 AM-11:45 AM Lunch
11:24 AM. MHS Patio
Como después tenemos clase con Mr. Ford, yo he preferido venirme al patio con las manos vacías, han sido dos horas de Spanish y necesito tomarme un descanso. Tan solo me he traído la bolsa de deporte para no tener que volver a la taquilla a por ello. Sin embargo, aunque llevamos juntas todo este tiempo y quiero pensar Yuly está tan harta como yo. Ella se ha traído, además, el cuaderno, como si pretendiese que mantengamos la costumbre de repasar a estas horas. Aunque yo prefiera que nos lo tomemos con calma. Ya hemos acabado con la redacción y aunque mañana vuelva a haber clase, no hay ejercicios que hacer, por lo cual no hemos de preocuparnos por nada. Mr. Bacon ya nos ha dado hoy un buen repaso a todos y es probable que a partir de mañana cambie el ritmo de las clases para que nos centremos. Se supone que ya habremos superado los días de adaptación y hay mucho temario que dar hasta junio.
Yuly: ¿Te sabes algún truco para engañar a Mr. Bacon y hacerle creer que eres hispanohablante? – Me pregunta con complicidad
Jess: ¿Hay algún truco? – Le pregunto contrariada. – Ya me comentaste el otro día lo de los ‘falsos amigos’, de modo que se he han quitado las ganas de intentarlo.
Yuly: Hay un truco. – Me responde. – No sé si Ana te habrá hablado de ello y por eso te es más fácil entender cuando te hablan.
Jess: Ana me obliga a leer. – Le explico. – Horas de lectura a cambio de horas de playa. – Alego. – Mi pronunciación es buena porque he de repetir lo que leo hasta que a ella le resulta creíble.
Yuly: Sí, ya demostraste el otro día lo bien que lees. – Me confirma. – ¡Parecías una mosquita muerta, pero nos dejaste a todos con la boca abierta! – Exclama. – Sin embargo, no me refiero a eso.
Jess: ¡No creo que Mr. Bacon se vaya a creer que de la noche a la mañana hablo de manera tan fluida, como tú! – Le indico con convicción. – Además, si eso de los ‘falsos amigos’ es cómo me explicaste, seguro que digo alguna barbaridad sin darme cuenta.
Yuly: Con este truco te será mucho más fácil acertar y tan solo deberás tener cuidado con la pronunciación, – Me indica con gesto serio y complicidad.
Jess: ¿Pretendes que lleve las respuestas escritas? – Le pregunto contrariada. – ¡Será complicarse demasiado! – Replico con impotencia.
Yuly: ¡Es más simple que todo eso! – Me corrige. – Basta con saberse unos trucos de caligrafía. – Me explica. – Se trata de los cognados. – En los que tan solo cambian la terminación de las palabras.
Para que me entere mejor de lo que intenta decirme, porque me deja un tanto sorprendida, me muestra los apuntes que lleva en el cuadernos con lo que entiendo son las reglas y algunos ejemplos de lo que se entiende son los cognados. Según ella, a mí me van a servir para dar el pego la próxima vez que Mr. Bacon me pida que hable en clase. De manera que le pueda hacer creer que tengo una mejorable fluidez con el idioma. Pero, en realidad yo estaré hablando en inglés, aunque con una pretendida mala pronunciación. Ante lo cual empiezo a no tener tan claro eso de que Yuly sea bilingüe. Más bien, una redomada farsante. Aunque entiendo que sabe de lo que habla y que tiene clara la diferencia entre eso de los ‘falsos amigos’ y los cognados. De lo contrario no habría quien la entendiera, que es mi mayor temor. Aparte que mi resistencia sea una forma de rebeldía, de reprimir mi entusiasmo hasta tener seguro que más pronto que tarde recibiré noticias de Daddy y me podré ir con él.
Cognados English-Spanish
- Perfect Cognates o cognados perfectos
Se trata de aquellas palabras que son exactamente iguales en ambos idiomas (a veces con alguna tilde más en castellano. Y diferente pronunciación, claro). Y, por supuesto, con el mismo significado, aunque no siempre sea el significado más habitual de la palabra inglesa va a ser su cognado
Doctor- Doctor
Excursion- Excursión
Horror-Horror
Legal- Legal
Material - Material
- Cognados en -tion
Las palabras que terminan en -tion en inglés suelen terminar en «-ción» en nuestro idioma.
Action- Acción
Attention- Atención
Condition. Condición
- Cognados en -ary
Es normal ver cómo los términos ingleses que acaban en -ary se traducen por palabras españolas en «-ario».
Dictionary- Diccionario
Ordinary- Ordinario
- Cognados en -ic
Muchos cognados ingleses que acaban en -ic tienen su equivalente en español con «-ico» (o -ica). En este caso, hay que tener presente que muchas veces estaremos ante palabras esdrújulas en español, así que llevarán tilde en la antepenúltima sílaba.
Academic- Académico
Basic- Básico
- Cognados en -ous
Las palabras inglesas que acaban en -ous se reflejan a menudo en voces españolas terminadas en «-oso».
Curious – Curioso
Famous - Famoso
- Cognados en -ct
Finalmente, los vocablos anglosajones acabados en -ct suelen tener su cognado en español acabado en «-cto».
Contact – Contacto
Perfect - Perfecto
Me temo que esto de aprender español será más complicado que aprenderse estas cuatro o cinco reglas, porque están los ‘falsos amigos’ y, sobre todo, las formas de los verbos. Que hay palabras del inglés que no tienen una traducción directa con el español. Lo que me obliga a adquirir un amplio vocabulario. De lo contrario, pareceré medio tonta, sino tonta del todo. Aunque ahora para Yuly parezca algo tan sencillo. Pero ella tiene la suerte de que se ha criado con ello. Mientras que yo me caracterizo más por haber pasado toda la vida renegando de ello. Además, dicen que hay cuestiones que cuanto antes se empiecen a aprender mejor. Por lo cual yo llevo catorce años y cinco meses de retraso. Supongo que, de no ser por el empeño demostrado por Ana desde que nos conocemos, ahora mismo no tendría la menor idea de lo que me habla porque he desaprovechado los últimos cuatro años en el St Francis y no creo que tenga el oído tan fino como se supone, por mucho que me entere de lo que me dicen. Aunque con Mr. Bacon tenga una cierta dificultad, porque es un tono de voz distinto y estoy más habituada al modo de hablar de Ana.
Yuly: ¿Te doy alguna sugerencia para el ejercicio del Foreign Language Club? – Me pregunta. – La cultura española está llena de curiosidades.
Jess: Pero, tendremos que escribir una redacción y hablar de ello ¿O tenemos que traer algún objeto? – Le pregunto.
Yuly: Supongo que, si traemos el objeto, mejor. – Me contesta. – pero habremos de tener cuidado que de no nos lo rompan ni nos lo roben.
Jess: ¿Tú tienes algo francés en tu casa? – Le pregunto contrariada. – Es posible que yo encuentre algo de España en el internado porque como sabes Ana está empeñada en que supere mis traumas.
Yuly: Le preguntaré a mi madre. – Me responde. – Seguro que encuentro algún recuerdo de sus viajes. – Me indica con optimismo. – También te puedo buscar algo para ti. – Me indica. – A mi madre le gusta sentirse como en casa.
Jess: ¿Tú en qué habías pensado, si te hubiera correspondido España? – Le pregunto por curiosidad.
Yuly: En el Camino de Santiago. – Me dice. – Tengo una concha de peregrino en mi habitación. Se guarda en la mochila y así no se pierde
Jess: ¿Es algo de recorrer largas distancias a pie? – Le pregunto porque me parece haber oído hablar de ello.
Yuly: Si quieres, puedes hablar sobre ello. – Me propone.
Jess: Si no pasa por Toledo, me lo plantearé. – Le respondo algo indecisa.
Yuly: Le pregunto a mi madre y mañana te respondo. – Me contesta. – Pero creo que el camino se inicia en los Pirineos y termina en la catedral de Santiago, en Galicia. En la Edad Media venia gente de toda Europa a venerar al santo.
Jess: Si se trata de un tema religioso, supongo que estará bien. – Le digo sin querer entusiasmarme más de lo debido.
Supongo que la sugerencia de Yuly parece interesante, pero, como le he dicho, prefiero que no haya alusiones a Toledo. Que no sea un camino que pase por allí. Aunque el hecho de que Yuly ya lo haya descartado me contraria de igual modo. Porque, al no tener muy clara la localización geográfica de la ciudad, que Yuly haya descartado que se encuentre en la ruta de los peregrinos implica que tampoco se encuentra en la zona norte del país. Donde creo haber oído que se extiende una cordillera montañosa a lo largo de toda la costa. De hecho, si Yuly ha hecho mención a Galicia, que es donde ella veranea, y está casi convencida de que la ciudad de Toledo no se encuentra por allí, mis opciones o mi ignorancia al respecto se reduce según voy tomando consciencia de la geografía y morfología del país y me reafirmo, más si cabe, en la probabilidad de que este verano no haya estado tan lejos. Lo cual desmonta muchas de mis creencias e inventiva al respecto. Lo sitúa lejos de la costa y, por lo tanto, de la posibilidad de que cuente con zona de playa, por mucho que a mí me entusiasme la idea. Al menos lo que tengo entendido, que es como en los Estados Unidos, cuanto más al sur se encuentre hará más calor.
¿Será la ciudad de Toledo un destino de peregrinos? Ello me cuadraría con la idea de que cuenta con un emblemático edificio religioso comparable con la Ciudad del Vaticano. Aunque ya sé que tan solo hay un Papa y tampoco me agradaría pensar que se ha producido algún tipo de cisma religioso. Pero puede que en Toledo se encuentre la sede de los cardenales o algo así. Que dado que parece que no se trata de una pequeña aldea perdida en medio de las montañas, puede que sea la sede de las autoridades eclesiásticas. Aunque también es cierto que tengo una imaginación tan viva que tampoco me encaja mucho eso de que, además, sea la capital del país, porque en ese sentido ya me ha quedado claro que se encuentra en Madrid. Aparte de que, con lo de los Juegos Olímpicos y la Exposición Universal de hace dos años, tampoco ha sido un lugar que haya resonado en los medios de comunicación. En todo caso, si no tiene demasiada relevancia en la actualidad, quizá lo tuviera en el pasado o perdiera su relevancia y carácter destacado en las últimas décadas, por eso de la dictadura tras la Guerra que los actuales gobernantes quizá hayan querido ser un país más abierto a las políticas de continente y borrar su pasado.
Yuly: ¿Ya estás pensando en la manera de no hacer el trabajo? – Me pregunta con complicidad ante mi silencio.
Jess: No, creo que lo haré. – Le respondo con bastante convicción. – Hubiera preferido hacerlo sobre Italia, pero me tendré que resignar.
Yuly: ¿Se molestará la profesora si yo lo hago sobre los éxitos deportivos de los españoles en Francia? – Me pregunta un tanto temerosa.
Jess: ¿Eso forma parte de la cultura francesa? – Le pregunto contrariada.
Yuly: ¡Les hemos ganados últimos tours! – Me dice con orgullo patrio. – Ya sabes lo de la carrera en bicicleta por todo el país. – Me explica. – La misma carrera la hay por Italia y por España.
Jess: ¡A mí no me preguntes! – Replico con intención. – Soy quien menos sabe de todo eso. – Me justifico con complicidad.
Yuly: A mi padre le gustan los deportes, de modo que es posible que haya algo de eso por casa. – Me responde. – ¡Verás la cara que se le pone cuando le pregunte! – Me dice con jocosidad. – Se suele quejar de que últimamente no hablamos mucho, pero es porque siempre está en actitud de padre. – Alega.
Debería recodarle que yo aún no he tenido ocasión de hablar con mi padre ni sé qué tipo de actitud mantendría conmigo, pero entiendo que esas alusiones por su parte forman parte de su naturalidad y no me lo he de tomar en tono ofensivo. Tampoco pretende destacar las diferencias conmigo por parecer mejor que yo. Aunque, en cierto modo, debería reconocer que es algo que me incomoda. Por lo que tal vez mis otras amigas no me han durado tanto. Sin embargo, con Yuly he de intentar ser un poco menos obsesiva en ese sentido. Entender que tan solo me habla de sus circunstancias, al igual que yo le menciono en internado o aludo a Ana, porque ésta es mi adulto de referencia. De hecho, no estoy tan segura de conocer los gustos ni aficiones de Ana porque tiene su vida privada y tampoco es una cuestión que comparta con nosotras de manera muy abierta. Ha establecido una separación entre su trabajo y su vida familiar. Al menos yo lo entiendo así. A pesar de que después del viaje que hemos hecho este verano tal vez la conozca un poco mejor, aparte que como en vacaciones se turna con Monica para cuidar de mí, es lógico pensar que se permita una mayor confianza, porque además soy mayor y se supone que algo más discreta.
No estoy muy segura de que Ana sea aficionada a las competiciones deportivas, porque cuando habla conmigo suele ser de cuestiones que me afectan a mí, temas de chicas o relacionados con mis traumas infantiles. Sin que como tal el deporte sea uno de ellos. Salvo las alusiones a mis juegos con los chicos. Por eso de que antes era un tanto ingenua y me dejaba engañar con demasiada facilidad. Hasta que crecí y me empecé a sentir un tanto avergonzada por los planteamientos de los chicos la hora de diferenciar a los equipos. Conseguir que Ana me comente alguna intimidad de las suyas suele ser bastante complicado. Tal vez por eso le guste más trabajar con niñas pequeñas, porque con la adolescencia nos volvemos demasiado curiosas y pretendemos vivir nuestra vida a partir de las vivencias de los adultos, en vez de las nuestras. En mi caso, supongo que eso está un poco más acentuado porque no me he movido del internado. Pero tampoco puedo negar mi curiosidad por saber qué hay más allá de lo que alcancen mis ojos. Aunque en todo lo referente a España prefiera mirar para otro lado o mirar de reojo y con mucho disimulo. Es decir, que, si quiero saciar mi curiosidad, como Ana me aconseja siempre, mejor que empiece por romper mis propias fronteras mentales. Ahora se supone que tengo el aliciente de que estudio en el Medford High, que está en los límites del barrio y he hecho amistad con una chica de West Roxbury con ascendencia española.
Confío en que Ana tenga alguna información sobre eso de ‘El Camino de Santiago’, que sea algo admitido por el Papa. Aunque supongo que no tengo motivos para encontrar discrepancias entre mis creencias y las de Yuly, cuando ésta ha admitido que, para para saber de ella, no hay más que preguntar a su párroco. Que, como yo, procede de un colegio católico. Por lo cual entiendo que al igual que somos muy diferentes en ciertos temas, en eso coincidimos plenamente. En su caso, tal vez haya participado más en las actividades de su parroquia, porque el otro día me insinúo que tal vez haya acudido a alguna de los encuentros interparroquiales organizados en St. Francis. Mientras que yo tengo la absoluta certeza de no haber ido nunca a West Roxbury. Por lo cual, si nos hemos llegado a ver antes de coincidir aquí, no ha sido algo de lo que seamos conscientes. En todo caso, supongo que el pasado no tiene relevancia, dado que ahora somos amigas y entiendo que tanto a sus padres como a Ana les parece bien. Es decir, que no espero que haya inconveniente en que haya el trabajo sobre el Camino de Santiago o si no ya me sugerirán otro tema menos comprometido.
Jess: Será mejor que vayamos a cambiarnos, no sea que Mr. Ford vuelva a decir que somos unas tardonas. – Le sugiero con intención.
Yuly: Sí, vámonos. – Me responde. – Ya te contaré mañana todo lo que descubra.
Jess: Yo le preguntaré a Ana. – Le comento. – ¡No se va a creer que me interese por algo referente a España!
Yuly: ¡Soy yo la primera que no me lo creo! – Replica. – Aún no te conozco lo suficiente, pero temía que fueras a salir corriendo cuando has leído la tarjeta.
Jess: Sí, bueno. – Le digo por no desmentir sus temores. – Pensarlo lo he pensado. – Le confieso sin tapujos. – Pero ya sabes que si no acudo a clase me mandan directa a Matignon High.
Yuly: Si se me ocurre algo menos español, mañana te lo comento. – Me propone con complicidad. – Yo creo que me decantaré por los éxitos deportivos.
Jess: ¡Ten cuidado no te vayas a pasar de lista! – Le advierto con inquietud. – Mr. Bacon se ha tomado la redacción como un intento de tomarle el pelo y nos tiene a las dos en el punto de mira.
Yuly: # Indurain, Indurain, Indurain… (Canta de manera animada)
Está claro que se siente algo molesta por no haber sido ella quien se llevase la tarjeta de España, por lo cual de un modo u otro pretende salirse con la suya y hacer una alusión a España, aunque debería centrarse más en la cultura y las tradiciones de Francia, que es lo que se nos ha pedido. Que se sienta herida en su orgullo no creo que le favorezca porque tampoco creo que la tutora lo haya hecho con mala intención. Aunque yo sería la primera a quien no le importaría que nos intercambiásemos las tarjetas. Pero una vez que ha quedado constancia por escrito, no podemos hacer trampas. La única opción que le queda es ayudarme con mi trabajo y que sea algo de las dos, a pesar de que nos hayan dicho que tiene que ser individual. Pero no creo que haya problema en que nos ayudemos. Yo, de ciclismo a nivel de competición, no entiendo demasiado. Diría incluso que tan solo sé montar en bicicleta y esperar que no haya ningún pinchazo. Pero, si Yuly quiere, no me importa aportar lo que descubra. Porque, si eso del ‘Tour’ es una competición internacional, es posible que no sea complicado recabar información. Aunque tal vez no en la intención de ensalzar el sentido y orgullo patrio de nadie. Pero sí de los éxitos deportivos de los países participantes. Al menos, como se trata de Francia, no creo que haya alusiones a Toledo.
Period Schedule Subject
Period 4 11:48 AM-12:36 PM Physical Education